La 'hucha' de las pensiones va a sufrir grandes cambios con la reforma del sistema que prepara el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá. Su intención es limitar el uso que el Gobierno puede hacer de ella cada año para sufragar el pago de las nóminas de los pensionistas. Para ello se propone que no se utilice el equivalente a más del 0,2% del PIB anual a partir de 2032.

Así figura en la propuesta que el Ejecutivo ha puesto encima de la mesa de los agentes sociales y a la que ha tenido acceso EL ESPAÑOL-Invertia. En el texto se define el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) y se recogen varias propuestas para limitar el impacto de la entrada en el sistema público de pensiones de la generación del baby boom y amarrar su viabilidad económica. 

Según el documento, se subirá el importe de las cotizaciones sociales en medio punto para 'rellenar' la hucha de las pensiones, el Fondo de Contingencia de la Seguridad Social. Hoy solo cuenta con 2.000 millones de euros y se debería emplear para cubrir desviaciones del gasto en estas prestaciones. 

Con todo, el Gobierno no solo planea resucitar este Fondo, sino también limitar su uso. Seguridad Social quiere acotar las tentaciones que puedan tener futuros gobiernos de España de recurrir a la 'hucha' de las pensiones para cubrir gastos impropios de este órgano.

Si a partir de 2032 el gasto previsto en pensiones supera los umbrales que todavía se tienen que pronosticar en el Ageing Report de la Comisión Europea de 2024, esta desviación se podrá cubrir con el Fondo de Reserva. Pero con un límite de disposición anual del 0,2% del PIB. 

Peor escenario

En caso de que el incremento del gasto en pensiones sea incuso superior a estas cantidades "o que se hayan agotado los activos del Fondo de Reserva", el Gobierno negociará con los agentes sociales medidas para bajar el gasto en pensiones. Estas propuestas se elevarían a la Comisión Parlamentaria del Pacto de Toledo. 

El texto aborda escenarios casi apocalípticos para las pensiones. Da un paso más y añade que, si todas las medidas citadas no bastaran, se planteará a los agentes sociales una nueva subida de las cotizaciones sociales que, en todo caso, estará limitada al 0,4% del PIB. 

La propuesta presentada por Escrivá también aborda escenarios más optimistas. De hecho, si el nivel de gasto en pensiones previsto no supera los umbrales que se manejen, se planteará usar los fondos de la 'hucha' para "reducir las cotizaciones sociales o mejorar la cuantía de las pensiones". 

Pero antes de todo esto, hay que volver a llenar la 'hucha' de las pensiones. Para ello, el Gobierno incrementará las cotizaciones en un 0,5% de 2023 a 2032 como mínimo. Esta cuota solo se podrá dedicar a cubrir, precisamente, posibles incrementos no previstos del gasto en estas prestaciones. 

Negociación

En cualquier caso, como ya ha contado este medio, todos estos contenidos del Mecanismo de Equidad Intergeneracional están abiertos a la negociación con patronal y sindicatos. Esta es la postura que ha mostrado el departamento que dirige Escrivá. 

De hecho, todavía se tienen que dirimir muchas cuestiones. Por ejemplo, cómo se repartirá el medio punto más a ingresar en cotizaciones sociales: cuánto tendrá que pagar el trabajador y cuánto la empresa. 

El Mecanismo de Equidad Intergeneracional vendría a sustituir el factor de sostenibilidad del Partido Popular de 2013 y formaría solo parte del entramado de medidas para controlar y atenuar el gasto en pensiones.

En este sentido, cabe recordar que para 2022 se prevé la segunda 'pata' de la reforma de las pensiones, que incluirá, entre otras cuestiones, una revisión de los años que se tienen en cuenta para el cálculo de la prestación. 

En cualquier caso, desde Seguridad Social se ha alabado la "buena actitud" de sindicatos y patronal en la reunión de este martes. "Ha habido muchas aportaciones constructivas y se está negociando", aseguran desde el departamento.