Las negociaciones entre el Gobierno, la patronal y los sindicatos sobre la reforma laboral continúan pese a que este jueves fueron incapaces de cerrar un acuerdo definitivo. Y eso que todo apuntaba a que la fumata blanca estaba cerca. Sin embargo, CEOE, UGT y CCOO se han enfangado en la subcontratación que se ha convertido en el principal punto de escollo.

Las fuentes consultadas por EL ESPAÑOL-Invertia explican que durante el repaso de los principales puntos, el Gobierno ha planteado su propuesta inicial: que cuando una empresa lleve a cabo una subcontratación el convenio que rija sea el de la compañía contratante.

Sin embargo, la patronal cree que es erróneo. Consideran que debe ser aquel al que esté acogido la empresa subcontratada. Tanto es así que ha sido el principal motivo de discusión ya que para la CEOE es una de las líneas rojas en las que no están dispuestos a ceder. 

Temporalidad 

La intención en este momento es la de seguir negociando. En especial porque todavía queda mucho por revisar del borrador presentado por el Gobierno. En lo esencial la propuesta del Ejecutivo se mantiene en los términos acordados en las últimas fechas, con un objetivo claro: reducir la temporalidad. 

De manera generalizada el contrato ordinario será el indefinido. El texto que estudian los sindicatos y la patronal y al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL-Invertia refleja dos tipos de contratos temporales: estructurales y formativos. 

El primero sólo puede responder a dos causas: circunstancias de la producción y por sustitución de otro trabajador que tenga reserva del puesto de trabajo. Eso sí, deberá quedar claro a quién sustituye el trabajador contratado. 

El de circunstancias de la producción sñolo puede firmarse en caso de aumentos ocasionales e imprevistos de la producción o por oscilaciones de la demanda. El máximo son seis meses al año, ampliables a doce si lo establece el convenio sectorial. 

Las oscilaciones de demanda podrán argumentarse también en caso de situaciones previsibles de la demadna como las rebajas o las campañas agrícolas. Ahora bien, el contrato será de un período de 90 días al año máximo y no consecutivos. Además, se obliga a la empresa a informar de la previsión de este tipo de contratación a los representantes sindicales. 

Otro de los cambios que recoge la última propuesta del Gobierno es que un trabajador pueda adquirir la condición de fijo es encadenar contratos durante 18 meses consecutivos. 

También se va a refrozar el contrato formativo con dos modalidades: formación en alternancia, que combina trabajo y formación. Habrá otro para la adquisición de la práctica profesional. 

La nueva legislación laboral que quiere instaurar el Gobierno fomentará el contrato fijo discontinuo para la realización de trabajos de naturaleza estacional o actividades de temporada. Podrán acogerse a esta modalidad los trabajos en contratas administrativas o mercantiles y se reconocerá la antigüedad de todo el periodo de la relación laboral, no sólo de los periodos efectivamente trabajados.

Ultraactividad

El otro aspecto en el que hay  consenso es en la ultraactividad de los convenios. A falta del acuerdo definitivo, los convenios se prorrogarán hasta que haya un consenso para renovarlos. Además, el del sector tendrá prevalencia sobre el de empresa. Éste podrá regular la elección entre abono o compensación de horas extras; el horario y la distribución del tiempo de trabajo; la adaptación de la clasificación profesional y las medidas de conciliación familiar, pero no la jornada laboral.

También se recoge en el texto que se pondrán en marcha los nuevos expedientes de regulación de empleo (ERE). Es el llamado Mecanismo Red. Contarán con dos modalidades: una cíclica, cuando se aprecie una coyuntura macroeconómica que aconseje la adopción de instrumentos de estabilización y con una duración máxima de un año; y otra sectorial, a la que podrán acogerse las empresas cuando un determinado sector aprecie cambios que generen necesidades de recualificación y de transición profesional.

La modalidad sectorial tendrá una duración máxima de un año, con posibilidad de dos prórrogas de seis meses cada una (en total 24 meses).

Negociaciones

En las próximas horas seguirá el intercambio de documentos y se tratará de desbloquear la situación. De momento la CEOE mantiene la reunión de su ejecutiva para las nueve de la mañana. El objetivo es evaluar la situación de las negociaciones.  Hora y media después hará lo mismo Comisiones Obreras, y queda todavía por ver si UGT llama a su directiva a una reunión. 

La intención continúa siendo la de llegar a un acuerdo. El objetivo es tratar de llegar al próximo martes 28 de diciembre para que la norma llegue al Consejo de Ministros. De este modo, se cumpliría con el compromiso alcanzado con Bruselas para lograr una reforma laboral con el consenso de CEOE, UGT y CCOO antes de que acabe el año. 

Sea como sea, si no se llegara a tiempo para el 28 o si hoy no se lograra el consenso definitivo, todavía habría margen hasta el día 31. Además, si se necesitara más tiempo la Unión Europea ya ha abierto la puerta a conceder un margen si lo que se logra con ello es que todas las partes queden satisfechas con el texto final.