A las 13:00 horas de este lunes entró en vigor la alerta roja por altas temperaturas en Sevilla y Córdoba. 44 grados de máxima se esperaba en sus campiñas, en el primer día laboral de la ola de calor inaugural del verano. Era también el gran estreno de la prohibición de trabajar al aire libre en las horas de máxima exposición solar cuando haya alertas por calor extremo que el Gobierno aprobó en mayo. Como por ejemplo a partir de las 13:00 horas de este lunes.
Sin embargo, pasada esa hora llamaron a Juan Antonio Castro. "Tuve que ir corriendo a varias obras. A las 15:00 era ya insoportable", cuenta a este periódico. El responsable de Construcción de UGT FICA-Sevilla señala "desmayos y fatigas" tanto en la construcción como en la industria, esencialmente del metal, de los que ha tenido conocimiento su sindicato.
También cuentan incumplimientos en CCOO. Algunas cuadrillas en el campo han denunciado "riesgo cierto de golpes de calor", y su sección sindical en Correos Sevilla asegura que la empresa pública desoyó sus peticiones para "evitar riesgos extremos".
"Entre las 17:00 y las 19:00 horas se preveía una temperatura de 44 grados a la sombra. Pero la empresa hizo caso omiso, poniendo en grave riesgo la seguridad y salud de los carteros y carteras", afirman.
Y a ellos se suman las quejas de jardineros, que han contado a este periódico que toda la indicación que les han dado para estos días es que prioricen trabajar en zonas de sombra.
Los sindicatos se mueven entre el aviso -CCOO ha anunciado que se personará como acusación por la vía jurídica correspondiente ante Correos si se produce algún caso de golpe de calor- y la denuncia ante la Inspección de Trabajo, a la que esta jornada inaugural pilló en huelga indefinida.
Su desconvocatoria este martes ha supuesto cierto alivio. Hasta el jueves no amainará la ola de calor en Andalucía, y se observa con celo el desarrollo de las jornadas laborales. Castro remarca que ya han remitido, solo por lo visto este lunes, 14 denuncias a la inspección.
"Hay microempresas con tres o cuatro trabajadores que estuvieron hasta las 15:00 en la obra", subraya. La construcción recoge en su convenio la jornada intensiva durante el verano, con horario de 7:30 a 14:30. "Es decir, ya estaba una hora y media por encima de la alerta roja", señala.
Tras lo visto el lunes, Castro señala que ha habido contactos con la patronal y se ha encontrado "una solución rápida". El horario queda modificado de 6:00 a 13:00, que arrancó ya este martes. Para los demás, tendrá que entrar en juego la inspección para ver si se producen incumplimientos susceptibles de sanción.
Desde el Ministerio de Trabajo se señala a EL ESPAÑOL-Invertia que en lo que va de año suma 4.000 órdenes de servicio vinculadas al calor.
La patronal
Con respecto a la implementación de esta medida y su impacto ante un verano que se prevé tan tórrido en Andalucía como el de 2022, la patronal andaluza, la CEA, ha comentado que "la normativa aprobada el pasado 11 de mayo no establece por decreto imperativo la prohibición de trabajar en las horas centrales del día con carácter generalizado en todas las actividades".
Manuel Carlos Alba, director del Área Jurídica y Relaciones Laborales de la CEA, ha remarcado que "serán los Planes de prevención de Riesgos y la Evaluación de riesgos de la actividad y de los puestos de trabajo los que determinen las medidas preventivas que hayan de tomarse en la empresa".
Si no se pueden garantizar las medidas de protección a trabajadores que desempeñen su actividad al aire libre y afronten estas condiciones, esas medidas "podrán incluir la prohibición de desarrollar las tareas laborales durante las horas del día en que se den estos fenómenos meteorológicos adversos".
En todo caso, insiste en que se trata del resultado de unos planes que pueden acordarse con los trabajadores mediante negociación colectiva y que en ese marco, además de adaptar o modificar la jornada, "se pueden establecer medidas paliativas y orientaciones recomendaciones adecuadas sobre hábitos de salud que permitan una mejor adecuación frente a situaciones de calor extremo".
Entre ellas, cita una "nutrición adecuada, no ingesta de bebidas alcohólicas", o "hidratación periódica".
Y finaliza con recado: "la salud de los trabajadores es una cuestión prioritaria, de modo que las empresas tienen que ser conscientes de la necesidad de poner estas medidas de protección para sus trabajadores que se pueden llevar a cabo sin menoscabo de la capacidad productiva de las mismas".
Soluciones variables
Algunas grandes empresas andaluzas, como el Grupo Azvi, que se dedica a obras, infraestructuras y servicios, están implementando soluciones variables en función de las "características" de cada tarea.
Así, en el caso de obras de mantenimiento ferroviario en Sevilla, el lunes se trabajaba en tajo nocturno, "por lo que no estuvieron en la franja de riesgo", señalan desde la dirección de Seguridad y Salud de la compañía.
En conservación de carreteras, "se paralizaron las actividades derivando a los trabajadores a la base". Y además, "en contratos de servicios en Sevilla se paralizaron las actividades, y se derivó el personal, dependiendo del caso, a trabajos a cubierto, y cuando no fue posible, se aprovechó para impartir sesión de formación sobre la exposición a las temperaturas extremas en las instalaciones del servicio", señalan.
Son los responsables de los centros los que toman las medidas "que se ajustan a las características de su proyecto".