El miedo a la recesión y a la destrucción del empleo disparó el ahorro en el segundo trimestre
Los expertos pronostican una caída de las tasas de ahorro en el futuro.
30 septiembre, 2023 02:37La economía española arrastra desde hace meses los temores a una posible caída. La crisis energética, la inflación o un contexto internacional desfavorable, con malos datos de países que tradicionalmente se consideran potencia, han acrecentado esas dudas y los hogares españoles han actuado en consecuencia. La tasa de ahorro de las familias se disparó hasta el 20% de su renta disponible en el segundo trimestre del año; hasta el 11,7% si se eliminan los efectos estacionales y de calendario.
Entre abril y junio de este año, los hogares españoles gastaron menos de lo que ingresaron. El miedo a una recesión económica o a un cambio en el comportamiento del empleo estaban presentes en las mesas de los españoles.
El economista jefe de BBVA Research, Miguel Cardoso, apunta que se trata de un comportamiento "muy entendible", en línea con el contexto que se vivía desde 2022.
"La gente reduce su consumo, tanto por preocupación como por la caída del poder adquisitivo", explica Cardoso a EL ESPAÑOL-Invertia.
Este 2023 arrancó con un repunte de la inflación, hasta el 5,9% en enero, con una escalada hasta el 6% en febrero, y una caída al 3,3% en marzo. Sin embargo, el segundo trimestre se estrenó con una subida al 4,1% en abril.
Mientras el IPC seguía este comportamiento errático, los españoles tampoco tenían claro que sus salarios fueran a mejorar en 2023. Los sindicatos y los empresarios no pactaron el V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), con recomendaciones salariales para la negociación de los convenios, hasta comienzos de mayo.
Ante esa incertidumbre "las familias quieren ahorrar", recuerda el director general del Instituto de Estudios Económicos (IEE), Gregorio Izquierdo. El miedo a un futuro económico peor lleva a los hogares a asegurarse un "colchón financiero y a posponer las decisiones de consumo".
Pese a tener las expectativas económicas en contra, "la renta no cayó de manera inmediata, crecía el empleo y los salarios se fueron acelerando", de ahí que resultara una "renta disponible que no se esperaba", señala Cardoso.
Esta renta disponible de los hogares españoles aumentó un 12,2% interanual, hasta los 251.190 millones de euros en el segundo semestre. En los mismos meses el gasto en consumo totalizó 200.740 millones de euros, un 5,2% más, según los datos del Instituto Nacional de Estadística. Por tanto, aunque contaban con un presupuesto mayor, las familias españolas contuvieron su gasto, de ahí que la tasa de ahorro se disparara.
11,7% desestacionalizado
Esa tasa de ahorro del 20% representa el porcentaje más alto desde el segundo trimestre de 2021, cuando superó el 21%. Sin embargo, Izquierdo advierte que "hay que tener cuidado" en el análisis de ese dato.
El director general del IEE prefiere detenerse en la tasa de ahorro sin los efectos estacionales y de calendario, que queda en el 11,7%, un porcentaje más aproximado a los niveles de ahorro de las familias españolas.
"El ahorro en España es muy moderado. Hay un problema de insuficiencia de ahorro. Hemos observado que en el tercer trimestre de 2022 se marcó un mínimo con un 4%", precisa Gregorio.
Las familias españolas sólo se salieron de sus patrones tradicionales de ahorro durante la pandemia, que llegó al 25% en el segundo trimestre de 2020. "Fue un ahorro forzado", recuerda el economista.
Además, el dato registrado entre abril y junio de 2023 tampoco le sorprende en exceso, ya que "las pautas de renta suelen ser más favorables" en ese trimestre.
"En el tercer trimestre, se gasta en vacaciones. En el cuarto, es Navidad. En el segundo, el gasto es más ordinario", detalla.
Punto de inflexión
Disipadas las dudas económicas, con la inflación algo más contenida y con los sueldos por convenio con una revalorización cercana al 4%, según el último dato de agosto del Ministerio de Trabajo, el economista jefe de BBVA Research prevé una caída de la tasa de ahorro.
Los indicadores económicos se presentan estables y, a falta de tres meses para cerrar el año, la economía española no se ha descalabrado. Esto volverá a extender la sensación de confianza en los hogares y volverá a perder el miedo al gasto.
"La gente va a ver que existe un punto de inflexión y va a utilizar ese colchón (de ahorro). No habiendo ese riesgo económico, esperamos que la tasa de ahorros baje en los próximos trimestres", pronostica Cardoso.
A mayor confianza en la evolución económica, mayor gasto de las familias españolas y, por tanto, menos ahorro. Además, el economista jefe de BBVA Research precisa que España no ha recuperado aún los niveles de consumo previos a la pandemia.
Otro impulso al gasto de las familias es la estabilidad del mercado de trabajo. "Hay una buena evolución del empleo y de los salarios, pero a la hora de gastar, es más importante el empleo que las subidas salariales. Cuando la gente percibe riesgo de desempleo, gasta menos", añade Izquierdo.
El director del IEE insiste en los bajos niveles de ahorro de los hogares y lamenta que "el ahorro está muy penalizado fiscalmente en España", para lo que pone como ejemplo los planes de pensiones privados, uno de los vehículos tradicionales de ahorro de las familias españolas.