El Gobierno ha cerrado el presupuesto de 2017 con un recorte de 2.000 millones en infraestructuras. Los 9.500 de 2016 quedarán reducidos a 7.500 millones. Una cantidad que engloba tanto la inversión directa realizada desde el Ministerio de Fomento, como la que se acomete desde Adif, o Aena.
El gasto en ferrocarril, como siempre, el grueso de este presupuesto de inversión en infraestructuras, con un 40% de la cifra total. La inversión destinada a este tipo de infraestructura se reduce un 29% hasta los 3.056 millones frente a los 4.318 millones de 2016.
También cae la inversión en infraestructuras hidráulicas que baja un 34% hasta los 826 millones de euros. Respecto a la inversión en carreteras, la segunda partida por tamaño, esta cae un 13% hasta los 1.913 millones de estas cuentas frente a los 2.205 millones de los anteriores presupuestos.
El Libro Amarillo de los Presupuestos también desvela cuánto va a gastar en Estado en la red de Alta Velocidad. Este año, el AVE se va llevar 2.730 millones de euros. Ese es la cifra destinada a ADIF Alta Velocidad y supone un recorte del 24,7% respecto a lo previsto en 2015, cuando esa misma partida alcanzó los 3.626 millones de euros. Los presupuestos indican que los créditos del Ministerio de Fomento ascienden a 514 millones de euros, que se corresponden prácticamente en su totalidad con las aportaciones patrimoniales al ADIF-Alta Velocidad y al ADIF, el gestor de la red ferroviaria.
En el caso de Renfe, el Gobierno ha mantenido casi intacto el dinero destinado. En concreto, 605 millones de euros.
No hay subidas para RTVE
El Gobierno ha congelado el presupuesto para la Corporación Radio Televisión Española (RTVE). La aportación del Estado se queda en 342 millones de euros.
Mientras tanto, las aportaciones a los Organismos públicos de investigación han crecido ligeramente un 0,1% hasta colocarse en 611 millones de euros, según aparece en el Libro Amarillo de los Presupuestos de 2017.