El Instituto de Estudios Económicos (IEE) prevé una caída del PIB del 11% este año si no hay rebrotes significativos como consecuencia de la crisis del coronavirus, elevando la tasa de paro al 20% y el déficit público al 11,5% del PIB, al tiempo que prevé una recuperación parcial en 2021, cuando la economía crecerá un 5,5%, aunque la tasa de paro será del 22% y el déficit del 7,5% del PIB.
Así se desprende del último informe de Coyuntura Económica del IEE, correspondiente al primer semestre, presentado este miércoles por el presidente del IEE, Íñigo Fernández de Mesa, quien ha explicado que el mayor impacto en España se debe a una estructura económica con sectores más afectados por el menor tamaño empresarial, el mayor confinamiento y restricciones y por la menor libertad económica (mayores rigideces).
Fernández de Mesa ha indicado que tiene un componente "muy significativo" desde el punto de vista de la oferta por el cierre por causas sanitarias, y también de demanda por el cierre de empresas y la incertidumbre generada por el Covid, por lo que lo que cree que los gobiernos deben atender esta situación, ya que han actuado de forma "muy contundente" a nivel oferta, pero no de demanda.
La previsión del IEE es que la economía caiga entre un 17% y 20% en el segundo trimestre, con un paro del 19%, por lo que el informe prevé una caída del PIB del 11% para este año, dentro de la horquilla de la última previsión del IEE de junio que pronosticaba una merma económica de entre el 8,4% y el 13,1%, debido principalmente a la contracción de la demanda nacional (-11,3%), en particular la liderada por el consumo privado (-11,3%) y por la inversión en capital fijo (-29,5%), compensada ligeramente solo por el sector exterior (+0,3%).
Fernández de Mesa ha explicado que el perfil de crecimiento de la actividad será en forma de "V asimétrica", ya que la caída durante los dos primeros trimestres de 2020 (-5,12% y -17,5%), no será compensada por el repunte en la segunda parte del año, al estimar un crecimiento del 14,5% y del 2,3% en el tercer y cuarto trimestre. De esta forma, el PIB se mantendrá un 5,3% por debajo de su nivel a comienzos de año.
Para 2021, sin incluir el impacto de los fondos europeos ni las consecuentes reformas, el IEE pronostica un avance económico del 5,5% por el efecto base sobre el crecimiento en el primer semestre y la recuperación gradual de la demanda de consumo y de inversión. La demanda nacional crecerá un 4,1%, con un avance del 5,4% del consumo final y del 8,9% de la formación bruta de capital fijo.
Déficit del 11,5% este año
En cuanto a la consolidación fiscal, el IEE apunta que el aumento del gasto público motivado por los efectos de la crisis, debido al aumento del gasto sanitario y por el mantenimiento de las rentas de los hogares a través de las prestaciones por desempleo, así como por el aumento del gasto estructural, derivados de los compromisos presupuestarios procedentes de la aprobación del ingreso mínimo vital, generarán unas "cuantiosas necesidades de financiación que se verán, asimismo, amplificadas por la caída de los ingresos públicos procedentes de la pérdida de rentas y de empleo".
En este ámbito, el IEE prevé que, dada la caída del PIB estimada para 2020, el porcentaje de gasto sobre PIB se eleve en algo más de diez puntos porcentuales y aumente, en menor medida (1,4 puntos porcentuales), la ratio de ingresos sobre el PIB, de forma que el déficit público se sitúe en el 11,5?% en 2020, reduciéndose este hasta el 7,5?% en 2021.
Paro hasta el 22% el año próximo
A pesar de que Fernández de Mesa ha valorado que los ERTE han permitido aminorar la incidencia de la crisis en el mercado de trabajo, el IEE augura un aumento de la tasa de paro hasta el 20,5% este año y aún mayor, hasta el 22%, el próximo año, por la destrucción de parte del tejido productivo.
En detalle, el empleo retrocederá un 6,4% este año, mientras que la caída se moderará al 1,4% el próximo ejercicio, en paralelo a un aumento del 1,8% y del 0,5% de los costes laborales por asalariado, respectivamente.
Según el IEE, la debilidad de la demanda, el bajo nivel de utilización de la capacidad productiva, así como la evolución del componente de los precios de la energía determinarán la evolución de la inflación durante los dos próximos años.
El IPC total se verá afectado fundamentalmente por el precio del petróleo, que mantendrá nula la variación anual en este año, repuntando en cambio hasta el 1,2?% en 2021. La tasa subyacente crecerá en media anual un 1% en ambos ejercicios.
No subir impuestos
En cuanto a la respuesta fiscal, ha indicado que España está a la cola a nivel de respuesta fiscal, con un 13%, frente al 40% de Alemania. En todo caso, ve una "gran noticia" el acuerdo europeo por su "gran impacto" al ser buena parte en forma de transferencias, si bien cree que hay que dar relevancia a las reformas.
Entre las recomendaciones, el IEE insta a profundizar en las medidas adoptadas, como los avales del ICO, que cifra en un 3,2% del PIB y los ERTE, que han salvado a 3,5 millones de empleos y añade un punto de PIB, y mantenerlas durante la reactivación; tener un marco regulatorio "predecible y estable" con un clima favorable a la actividad empresarial como motor de prosperidad.
También insta a no olvidar la consolidación fiscal para dar "confianza", algo que no quita para que 2020 sea un año "excepcional" de un déficit elevado para evitar una "catástrofe" social, pero si aboga por un programa de estabilidad presupuestario a medio plazo.
A su vez, ve "muy importante" no subir impuestos, porque la medida tendría un impacto "muy negativo" en el crecimiento al considerar que el margen recaudatorio es "muy poco", así como que ve preciso generar un marco "eficiente y favorable" para el desarrollo empresarial.
Sobre el estudio de la AIReF sobre beneficios fiscales, cree que hay que mejorar el sistema para que no haya "desincentivos fiscales"
El presidente del IEE también ha remarcado la necesidad de confianza y no lanzar "globo sondas", mejorar la competitividad disminuyendo la burocracia y gastos administrativos y aprovechar.