El año 2021 va a comenzar con un crecimiento cero en el primer trimestre, según las previsiones de BBVA Research. Es decir, España no recuperará de aquí a marzo ni un euro de la riqueza perdida en el dramático 2020. Aunque con la campaña de vacunación en marcha se ve la luz al final del túnel, lo cierto es que hay motivos para la cautela, e incluso el pesimismo.
Se nota en las últimas apariciones de la vicepresidenta económica del Gobierno, Nadia Calviño, ante la opinión pública y ante los inversores. Desde el Ministerio de Economía se habla ahora de un crecimiento "en el entorno del 7%" en 2021 y se omite la previsión oficial del 9,8% con la que se elaboraron los Presupuestos y se incorporó el efecto de los fondos europeos.
Sin embargo, si hay un sector en el que cunde el pesimismo es en el comercio. El pasado año, las tiendas de Castilla y León y algunas de Cataluña permanecieron cerradas el 40% del tiempo por las restricciones a la movilidad, según estimaciones de Anged (Asociación Nacional Grandes de Empresas de Distribución). Y eso que la situación de Estado de alarma o de desescalada afectó solo a tres trimestres.
Nuevas restricciones
El anuncio de varias comunidades autónomas -entre ellas, una vez más, Castilla y León- de nuevas restricciones que afectan a los comerciantes va a prolongar la agonía del comercio en el año que se había prometido la llegada de la recuperación.
En 2020, las tiendas ubicadas en las regiones con más restricciones y cierres comerciales fueron las que más pérdidas sufrieron con Andalucía a la cabeza -también impactada por la caída del turismo- (-12%), seguida de Asturias y Cataluña (-11%) y Castilla y León (-8%).
Madrid fue la región más permisiva en el segundo semestre del año para el comercio y la hostelería, lo que ayudó a contener los daños económicos de la Covid-19.
Los servicios de estudios de economía han comprobado en los últimos 10 meses que cuando las autoridades levantan restricciones, el consumo se recupera de forma rápida, gracias, en parte, al ahorro acumulado durante los confinamientos.
Sin embargo, la comunidad que preside Isabel Díaz Ayuso ha arrancado el año con el colapso que ha provocado la borrasca Filomena.
La gran nevada ha desplomado el gasto con tarjeta en Madrid en un 24% interanual en unos días en los que ese consumo ha caído de media un 4% en el resto de España, según los datos recopilados hasta el pasado jueves por BBVA Research.
El Ayuntamiento de Madrid estima que las pérdidas para el comercio y la hostelería generadas por la nevada y la helada en la última semana alcanzan los 900 millones de euros, a los que se suman otros daños -ajenos a este sector- que elevan el golpe para el conjunto de la ciudad hasta los 1.398 millones de euros, según el alcalde, José Luis Martínez Almeida.
Golpe a las rebajas
El temporal ha coincidido con el arranque de las rebajas. Según explican desde Madrid Foro Empresarial, esto ha hecho que algunos comerciantes den marcha atrás en sus planes para sacar del ERTE a empleados para esta campaña que ya sin borrasca se presentaba complicada para el sector. En especial, para el textil.
Los datos que publicó este diario el pasado 5 de enero de la patronal textil (Acotex) ante el arranque de la campaña de las rebajas anunciaban que las ventas caerían entre un 35% y un 40% con respecto al año anterior.
Sin embargo, el temporal de los últimos días podría empeorar esas cifras dado el fuerte peso que tiene la ciudad de Madrid en el PIB español. Tanto es así que BBVA Research cree que la borrasca Filomena podría restar una décima al PIB español este año.
Se trata de un impacto pequeño en términos globales -al tratarse de un fenómeno acotado en el tiempo- pero que no ayuda a levantar el ánimo de los consumidores, algo esencial para impulsar el gasto. Y se suma a una situación desesperada para los comerciantes.
Desplome próximo al 9%
Según los cálculos de los servicios de estudios que maneja el sector de la distribución con datos hasta el mes de noviembre, el desplome del consumo en grandes superficies y centros comerciales alcanzó el 8,7% en 2020.
Si se tiene en cuenta que la alimentación repuntó con fuerza (+8,9%) la caída de las ventas para el resto de productos fue muy importante (-16,1%).
En términos globales, es decir, incluyendo todo tipo de comercios y no solo los ubicados en grandes superficies, el consumo bajó hasta noviembre un -6,4%. Pero este dato también incorpora la subida de la alimentación y del equipamiento del hogar, con lo que el hundimiento fue mucho más duro de lo que refleja esa cifra para tiendas de textil y otros productos.
Ante esta situación, uno de cada cuatro establecimientos ya ha echado el cierre a sus negocios por la Covid-19.
Aunque son muchas las empresas del sector que se han acogido a los ERTE, la caída de las ventas y el paso de los meses está provocando ya una destrucción de empleo que luego podría no recuperarse.
Suben los ERTE
El mes de diciembre no fue bueno para el mercado laboral y en el caso del comercio fueron desastrosos teniendo en cuenta que la campaña de Navidad siempre anima las contrataciones en el último mes del año.
Sin embargo, la afiliación a la seguridad social del comercio en diciembre experimentó una caída del 3,5%. Esto supone una pérdida de 67.574 afiliados frente al año anterior. A esa cifra hay que sumar las 63.699 personas que el comercio minorista tiene en situación de ERTE, según los últimos datos del Ministerio de la Seguridad Social recogidos por Anged. Esto supone el 6,4% de los ocupados.
Lo más preocupante en este contexto es que el comercio en España se está distanciando de la recuperación de los principales países europeos, donde las ventas llevan creciendo desde el mes de junio.
Daños al canal 'online'
El coronavirus ha acelerado el e-commerce y las ventas 'online' experimentaron un fuerte repunte el pasado año. Pero el comercio digital también ha arrancado el año con un bache, el provocado por Filomena, que ha cortado la distribución en Madrid y otras comunidades autónomas afectadas por el temporal.
No obstante, desde Anged explican que la logística se va recuperando poco a poco y se muestran más preocupados por la evolución de la tercera ola que por Filomena, ya que la próxima semana debería superarse este episodio, mientras que al coronavirus le queda más tiempo para ser superado.
Una vez que los españoles recuperen la movilidad, la gran incógnita para los comerciantes es saber cuándo va a volver el comercio internacional. En 2020, España perdió más de 60 millones de turistas, con lo que el gasto turístico se desplomó un 78%.