Importante gesto de distensión entre la Unión Europea y Estados Unidos tras la guerra comercial emprendida por Donald Trump. En su primera conversación telefónica, el nuevo presidente norteamericano, Joe Biden, y la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, han acordado este viernes congelar todos los aranceles impuestos por las dos partes en el contexto de la disputa Airbus-Boeing.
El pacto supone una excelente noticia para la industria agroalimentaria española, que se ha visto particularmente penalizada por estos recargos, pese a no tener nada que ver con el conflicto. Trump impuso gravámenes del 25% a productos españoles como el queso fresco, las aceitunas, el aceite de oliva, los cítricos o el vino.
"Como símbolo de este nuevo comienzo, el presidente Biden y yo hemos acordado suspender todos nuestros aranceles impuestos en el contexto de las disputas Airbus-Boeing, tanto sobre aviones como sobre el resto de productos, por un periodo inicial de cuatro años", ha anunciado Von der Leyen en un comunicado.
"Ambos nos hemos comprometido a resolver nuestras disputas aeronáuticas, basándonos en el trabajo de nuestros respectivos representantes comerciales. Esto constituye una excelente noticia para los negocios e industrias a ambos lados del Atlántico y una señal muy positiva para nuestra cooperación económica en los próximos años", asegura la presidenta.
"Los líderes han acordado suspender las tarifas relacionadas con las disputas aeronáuticas durante cuatro meses y trabajar para resolver estos conflictos de larga duración en la Organización Mundial del Comercio (OMC)", señala el comunicado difundido por la Casa Blanca al término de la conversación.
Reconciliación
"Por fin salimos de la guerra comercial entre Estados Unidos y Europa, que sólo deja perdedores. Debemos continuar por la vía de la cooperación para encontrar un acuerdo definitivo. En este tiempo de crisis económica, debe ser el momento de la reconciliación", ha dicho el ministro de Finanzas francés, Bruno Le Maire. Además de a España, las sanciones de Trump afectaron particularmente a Reino Unido, Francia y Alemania.
La ministra de Comercio, Reyes Maroto, considera que esta decisión es "un gran paso para llegar cuanto antes a una solución definitiva en el seno de la OMC y lograr levantar definitivamente unos aranceles que están lastrando a la industria aeronáutica y agroalimentaria española, y poder retomar las exportaciones al mercado estadounidense, clave para nuestras empresas".
Por su parte, el titular de Agricultura, Luis Planas, se ha felicitado por una "excelente noticia para el conjunto del sector agroalimentario, que se ha visto injustamente afectado por estos aranceles que nada tienen que ver con el sector".
En total, Estados Unidos ha penalizado a productos europeos por valor de 7.500 millones de dólares por las ayudas públicas comunitarias a Airbus, que fueron declaradas ilegales por la OMC. Por su parte, la UE impuso el año pasado aranceles a productos norteamericanos por valor de 4.000 millones de dólares por las subvenciones ilegales de Washington al gigante aeronáutico Boeing, también con el visto bueno de la OMC.
La Comisión Europea intentó durante años lograr una solución acordada con Trump, basada en la supresión de todos los aranceles y un nuevo marco para las ayudas públicas a los constructores aeronáuticos pactado entre Bruselas y Washington. Pero el magnate inmobiliario rechazó todas las ofertas y mantuvo la guerra hasta el final. De hecho, llegó a tachar a la UE de "enemigo" comercial al mismo nivel que China.
Biden quiere pasar página desde el principio de su mandato. En su conversación con Von der Leyen "ha subrayado su apoyo a la Unión Europea y su compromiso de reparar y revitalizar la alianza entre Estados Unidos y la UE", según la Casa Blanca.
Los dos líderes han acordado reforzar la cooperación para contener la pandemia de la Covid-19 e impulsar la recuperación económica. También han prometido coordinarse en asuntos de interés compartido, entre ellos China, Rusia, Bielorrusia, Ucrania y los Balcanes, así como en la lucha contra el cambio económico.
En materia económica, Von der Leyen ha propuesto a Biden una "nueva asociación enraizada en nuestros valores y principios compartidos". Bruselas quiere establecer con Estados Unidos una "alianza tecnológica" para abordar conjuntamente los "retos de la innovación".