La Unión Europea se queda atrás en la carrera mundial por la recuperación tras la crisis de la Covid-19 respecto a Estados Unidos y China. Las medidas de confinamiento adoptadas por la mayoría de Estados miembros por la nueva ola de contagios y la lentitud de la campaña de vacunación han provocado que la economía europea se sitúe en territorio negativo durante el primer trimestre del año, tras el descenso experimentado entre octubre y diciembre.
Entre enero y marzo, el producto interior bruto cayó un 0,6% en la eurozona y un 0,4% en el conjunto de la UE en comparación con el trimestre anterior, según la estimación preliminar publicada este viernes por Eurostat, la oficina estadística comunitaria.
Este retroceso se produce tras las caídas en el cuarto trimestre de 2020 (-0,7% en la eurozona y -0,5% en la UE). Es decir, dos trimestres seguidos de contracción tanto en la eurozona como en la UE (la definición técnica de recesión). Europa ya vivió una primera recesión sin precedentes durante la primera mitad de 2020, y un fuerte rebote entre julio y septiembre que después no ha tenido continuidad.
En comparación con el mismo trimestre del año pasado, el PIB decreció un 1,8% en la eurozona y un 1,7% en el conjunto de la UE durante el primer trimestre de 2021, tras una caída del 4,9% en la eurozona y del 4,6% en la UE en el trimestre anterior, según Eurostat.
La recaída en recesión de la UE contrasta con el inicio de la recuperación en Estados Unidos y China. Durante el primer trimestre del año, la economía norteamericana crecían un 1,6%, mientras que la china avanzó un 0,6%. Las cuatro grandes potencias de la eurozona (Alemania, Francia, Italia y España) han reclamado esta semana activar cuanto antes las ayudas del fondo Next Generation de 750.000 millones de euros para no quedarse atrás y bajar a segunda división en la escena mundial.
Entre los países para los que hay datos disponibles, los mayores desplomes económicos en el primer trimestre se registraron en Portugal (-3,3%), Letonia (-2,6%) y Alemania (-1,7%). La economía española retrocedió un 0,5% y la italiana un 0,4%. En contraste, Francia escapa a la recaída en recesión con una subida del 0,4%.
Bruselas espera ahora que la economía europea empiece a remontar a partir del actual segundo trimestre, gracias al avance de las vacunas y la relajación de las restricciones, y alcance velocidad de crucero durante la segunda mitad del año. El indicador de sentimiento económico de la UE (ESI, por sus siglas en inglés) ha experimentado un fuerte rebote en abril y se sitúa por primera vez en niveles previos a la pandemia.
"Otro ligero descenso para la economía europea en el primer trimestre. Pero la recuperación está en marcha y será fuerte en la segunda mitad del año. Gracias también a Next Generation EU", ha escrito el comisario de Asuntos Económicos, Paolo Gentiloni, en su cuenta de Twitter.
Eurostat ha publicado también este viernes los datos de paro correspondientes al mes de marzo, que sitúan de nuevo a España como el segundo país con peores cifras de la UE. En concreto, la tasa de desempleo en España se sitúa en el 15,3%, un dato que sólo supera Grecia y es casi el doble que la media de la eurozona (8,1%). Nuestro país es además líder absoluto en paro entre los jóvenes menores de 25 años (37,7%).
Finalmente, la inflación en la eurozona subió en abril hasta el 1,6% desde el 1,3% registrado en marzo, sobre todo debido al aumento de los precios de la energía. El Banco Central Europeo (BCE) considera que se trata de un repunte debido a factores temporales y que todavía deben mantenerse los estímulos monetarios y fiscales para llegar al objetivo del 2%.