El impuesto de matriculación, una tasa que está transferida a las comunidades autónomas, recaudó un total de 325,64 millones de euros en el primer semestre, lo que supone duplicar (+109%) los ingresos que las administraciones obtuvieron por este tributo en el mismo periodo de 2020, cuando la crisis del coronavirus ya había afectado al mercado automovilístico nacional.
Según datos de la Agencia Tributaria recogidos por Europa Press, solo en junio el impuesto de matriculación aportó a las arcas públicas 58,65 millones de euros, un 57% más que en el mismo mes del año pasado, cuando alcanzó los 37,38 millones.
Entre las causas que explican este aumento de la recaudación se encuentra la crisis de la pandemia del coronavirus, que provocó un cierre de los concesionarios entre los meses de marzo y mayo de 2020, lo que motivó una caída de las matriculaciones nunca vista en la serie histórica española.
Además, a comienzos de este ejercicio entró en vigor la nueva normativa de emisiones WLTP, más estricta, por lo que los vehículos homologan más emisiones de dióxido de carbono (CO2). Sin embargo, no se adaptó el impuesto de matriculación a esta nueva legislación hasta finales del mes de junio, lo que hizo que más modelos ahora pagasen esta tasa al ser adquiridos.
Las cifras de la Agencia Tributaria indican que el importe medio a pagar fue de 770 euros en lo que va de año, un 94% más, mientras que en junio se situó en los 690 euros, un 71,2% más que en el mismo mes de 2020.
Sube el precio mínimo
Entre otros datos, el precio medio de los vehículos entregados en España en el primer semestre, incluyendo el impuesto de matriculación, se situó en los 20.291 euros, un 6,7% más que los 19.019 euros que costaban entre enero y junio del ejercicio precedente. En junio, esta cifra fue de 20.238 euros, un 5,9% más.
Además, el valor total de los modelos nuevos comercializados en el mercado español hasta junio alcanzó los 8.261 millones de euros, un 13,1% más, mientras que el mes pasado fue de 1.660 millones, un 4,2% menos.
Por su parte, las emisiones medias de dióxido de carbono (CO2) se situaron en los 127 gramos por kilómetro recorrido en lo que va de año, 12 gramos más que en el mismo periodo de 2020, mientras que en junio este dato fue de 124 gramos, 9 gramos más que el año pasado.