Fernández-Lasquetty, exjefe de gabinete de Casado: "Mi apoyo es 100% para Ayuso, no va a saltar a la política nacional"
El consejero de Hacienda de Madrid alerta en EL ESPAÑOL-Invertia de que "Cataluña quiere que se le perdone la deuda por el FLA y eso es inadmisible".
8 noviembre, 2021 05:30La Comunidad de Madrid afronta la fase final de la aprobación de sus Presupuestos autonómicos y para ello el gobierno regional necesita el apoyo de la Asamblea de Madrid. Pero los de Isabel Díaz Ayuso no se plantea pactar con otra formación que no sea Vox. Así lo indica el principal timonel de la negociación presupuestaria, Javier Fernández-Lasquetty (1966), quien en medio de la batalla del PP madrileño se pone del lado de su presidenta, aunque descarta que vaya a dar el salto a la política nacional.
En la entrevista concedida a EL ESPAÑOL-Invertia, el consejero de Hacienda, Economía y Empleo y uno de los hombres fuertes de Díaz Ayuso aborda la situación en la que se halla la reforma de la financiación autonómica, que le lleva a calificar al Ministerio de Hacienda como "incompetente". Carga también contra la gestión económica del Gobierno y alerta sobre la lentitud y la incertidumbre existente sobre el reparto de los fondos europeos.
Hay guerra en el PP madrileño. Y usted tiene que tener el alma dividida. Ha sido el jefe de gabinete de Pablo Casado pero ahora es uno de los hombres fuertes de Isabel Díaz Ayuso.
(Se ríe) Yo solo soy uno más del montón. Como dije en la junta directiva regional de mi partido, mi apoyo es 100% para Isabel Díaz Ayuso. Creo que sería la presidenta del PP de Madrid que los militantes desean tener. Al mismo tiempo, en todo lo que le he visto hablar y comportarse, en público y en privado, en reuniones de gobierno formales e informales durante los últimos meses, no tiene en la cabeza otra cuestión que gobernar y gestionar la Comunidad de Madrid.
También le voy a decir que en Valencia, ante todo el Partido Popular, ya dijo que ella no tiene ninguna aspiración de saltar de la política regional a la nacional. Ni ahora ni en el futuro.
¿Cuáles son las principales características de los Presupuestos que está tramitando el Gobierno de Madrid?
Son unos Presupuestos para la recuperación en unos tiempos en los que Madrid está en recuperación. Son dinamizadores y están enfocados a que haya más actividad económica, más empresas, más autónomos, más empleos creándose desde el sector privado.
En segundo lugar, son unos Presupuestos bien fundamentados. El cuadro macroeconómico que da sustento a todas sus cifras ha sido refrendado por la AIReF y lo valida, a diferencia de los Presupuestos Generales del Estado.
¿Cuáles son esas cifras 'macro'?
Pues un crecimiento de 6,4% en este año y del 6,1% en 2022.
Por encima de la media nacional. ¿Cree que la revisión a la que parece estar abocado el cuadro 'macro' del Gobierno central obligará a Madrid a revisar las suyas?
No, no lo creo. No es algo que me alegre, pero se está viendo claramente que Madrid tiene un crecimiento más rápido y más intenso que el resto de España. Madrid no es una isla, pero España es el país de la UE que más se hundió en la pandemia. Es el país que más PIB perdió y el que menos ha recuperado de momento, y eso es terrible. Nosotros calculamos que Madrid alcanzará el PIB prepandemia en torno a primer/segundo trimestre de 2022.
Calculamos que Madrid alcanzará el PIB prepandemia en torno al primer/segundo trimestre de 2022
Los problemas de las materias primas y los cuellos de botella pueden afectar, y mucho, a economías como la madrileña. ¿Tiene previsto este fenómeno en sus cálculos y sería posible una eventual desaceleración económica?
Los Presupuestos se han hecho con un escenario de inflación, de al menos el 3%, y siendo conscientes de la realidad que nos rodea, con una crisis de suministros evidente. Nos preocupa, le tiene que preocupar a todo el mundo. Tenemos que pensar qué se puede hacer desde el Gobierno central, que es el que tiene influencia en cuestiones como aranceles, fronteras, etcétera, y qué se puede hacer para favorecer el tráfico y el comercio internacional y acelerarlo lo máximo posible.
Estos Presupuestos de la recuperación no los puede aprobar el PP solo, sin los apoyos de otros partidos de la Asamblea de Madrid. Parece que la cosa está más avanzada con Vox. Pero, ¿descarta lograr los apoyos de otras fuerzas de la Cámara?
No nos lo planteamos. La izquierda en Madrid sigue empeñada y amarrada a posiciones que no son compatibles con las nuestras. Son posiciones enemigas de cualquier bajada de impuestos, lo que piden es subirlos. Y de una visión del gasto que no es compatible con la nuestra. Estamos hablando con Vox. Estamos avanzando con ellos. Todavía queda camino pero esperamos llegar a buen término.
Siempre se dice cuando se pactan unos presupuestos hay que sacrificar parte de su contenido. ¿Cuál va a ser el sacrificio del Gobierno de Madrid?
¿De cara al acuerdo con Vox? Estamos en la negociación. No lo sé. Es evidente que una negociación supone que ambas partes ceden en todo, en poco o en mucho. Nosotros estamos dispuestos a aceptar cuestiones que le importan a Vox. Sobre todo estamos dispuestos a hablar sobre ellas.
Isabel Díaz Ayuso tiene 65 diputados y obtuvo el respaldo muy mayoritario de los madrileños. Ese respaldo se obtuvo para las políticas de Isabel Díaz Ayuso, no para sustituirlas por otras. Creemos que es compatible.
Madrid va a ejecutar por fin una vieja promesa de su Gobierno, particularmente la rebaja del IRPF y de impuestos propios. ¿Cuánta recaudación estima perder por esta medida?
Estimamos no perder recaudación. ¿Por qué digo esto? Esta es la quinta bajada del impuesto sobre la renta que hace la Comunidad de Madrid. En las cuatro anteriores, la recaudación aumentó. Yo no digo que haya una regla que haga que cuando se baja el tipo del impuesto suba la recaudación. Solo constanto el hecho de que en las cuatro anteriores aumentó la recaudación.
¿Por qué? Porque la economía no es estática y los 334 millones de euros que los madrileños se van a quedar en sus bolsillos van a entrar en el flujo económico, van a transformarse en inversión, en consumo o en ahorro, y eso a su vez generará una actividad económica que a su vez generará empleos. Por tanto, no aventuro ni mucho menos una cifra concreta de bajada de recaudación.
También es consejero de Empleo. ¿Cómo valora la marcha de la negociación de la reforma laboral?
Lo veo con una preocupación e inquietud enormes. No se es lo suficientemente consciente de lo que va a significar para la sociedad española, y especialmente para los que quieren empezar a trabajar en España, lo que parece que se va a hacer. Es decir, la supresión total o parcial de la reforma laboral de 2012. Lo que nadie dice es lo que vendría a continuación, que es volver al sistema laboral más rígido, más anticuado, más polvoriento de toda Europa.
Aquel sistema laboral que no tenía capacidad de generar empleo ni cuando había un crecimiento económico del 2%.
Pero parece que la derogación va a ser muy aguada, muy parcial. No se va a tocar, la indemnización por despido, la formulación de los ERE…
¿Pues entonces para qué la hacen? ¿Para darse una alegría al cuerpo ideológica? ¿Para que se queden contentos en la sede de la agrupación o en la del sindicato? No se puede jugar con las expectativas de miles de personas, de empresas, de trabajadores y de gente que está mirando los anuncios de empleo. No se puede jugar a que simulo que hago una cosa que en realidad no hago. Que sí que la van a hacer. Porque todo lo que dicen que van a hacer lo terminan haciendo.
¿Para qué van a derogar de forma parcial la reforma laboral de 2012? ¿Para darse una alegría al cuerpo ideológica? No se puede jugar con las expectativas de miles de personas y de empresas
Me parece que es tratar con frivolidad cosas muy graves y muy serias. La reforma laboral del 2012 ha permitido que millones personas trabajaran incluso con un crecimiento económico relativamente débil. ¿Por qué se pone en riesgo eso?
La reforma laboral del PP no logró acabar con un problema endémico del mercado laboral español: la temporalidad.
La reforma laboral de 2012 ha reducido la temporalidad. Cuanta más flexibilidad haya menos temporalidad habrá.
Aun así, estará de acuerdo conmigo en que la temporalidad sigue siendo un problema grave. Supone alrededor del 22% en el sector privado.
Porque seguimos teniendo un mercado laboral muy rígido. La reforma laboral de 2012 no llevó a que fuera el más óptimo. Hubiera debido haber una reforma Báñez 2.0 a la altura de 2018 y seguro que se hubiera generado mucho más empleo y se hubiera reducido aún más la temporalidad.
¿Cree que con esa medida hubieran subido los salarios y se hubiera reducido la precariedad, que es otro de los problemas del mercado laboral español?
Probablemente sí. Cuanto más empleo haya, más van a subir los salarios, porque significa que hay más demanda de trabajadores. Al final, contingentar y racionar todo lo que hace es empequeñecerlo.
¿Qué medidas concretas pondría usted sobre la mesa para acabar con la temporalidad?
Administro las competencias de empleo de la Comunidad de Madrid. Tengo muy claro cuál es el camino que no se debe seguir, que es el de volver a un sistema rígido e ineficiente como el que había en el pasado en España. Pero no voy a formular un programa de reformas. Mi partido lo hará y mi partido lo lleva haciendo desde hace mucho tiempo. También digo esto: Madrid tiene unos salarios mucho más altos que la media y una temporalidad mucho más baja que la media.
Se suponía que se iba a presentar una propuesta de reforma de la financiación autonómica en el mes de noviembre. ¿Sabe algo al respecto? ¿Ha recibido alguna llamada del Ministerio de Hacienda?
El Ministerio de Hacienda es bastante incompetente
El Ministerio de Hacienda es bastante incompetente. No avanza de una manera competente en los problemas que tiene entre manos. Para cualquier cosa tarda mucho más de lo que debería. Pongo un ejemplo: El criterio de distribución del fondo Covid de este año lo comunicó a las comunidades autónomoas a finales de julio, con medio ejercicio vencido. A la Comunidad de Madrid le quitó 700 millones de euros.
No tenemos ninguna comunicación oficial, extraoficial o de rumorología sobre la reforma del sistema de financiación autonómica. Lo único que vemos es que los presidentes de las comunidades autónomos del Partido Socialista se están reuniendo.
Pero también se están produciendo movimientos por parte de presidentes autonómicos del PP. El de Andalucia, Juan Manuel Moreno, se ha reunido con el de Comunidad Valenciana, Ximo Puig.
Sí, pero no se ha producido ninguna reunión suscitada por la ministra de Hacienda con todas las comunidades autónomas, que es lo que debería hacer. Primero, la negociación para la reforma de la financiación autonómica tiene que ser multilateral. No puede ser una cosa bilateral primero con Cataluña y luego ya lo que quede, para los demás.
Para nosotros es fundamental que aumente la capacidad normativa. Es decir, que podamos seguir decidiendo sobre un mayor número de impuestos.
Tener mayor autonomía fiscal.
Exactamente. Para que cada uno haga la política que sus electores le indiquen y el rumbo que quiere llevar.
Tercero, queremos un sistema de financiación en cual se pongan sobre la mesa distintas formas de ponderar el criterio de población. Una cosa es la población real y otra la población ajustada,que se hace en función de una serie de criterios como la dispersión de la población, la edad, etcétera. A lo mejor hay que pensar en algunos factores más que añadir a ese ajuste de población para que la imagen sea más real.
A día de hoy, el actual sistema de ajuste de población hace que Madrid pierda más de 200.000 habitantes a efectos de financiación. Y esos más de 200.000 habitantes por supuesto que consumen recursos y servicios públicos.
El actual sistema de ajuste de población hace que Madrid pierda más de 200.000 habitantes a efectos de financiación autonómica
Además, necesitamos un sistema de financiación autonómica que tenga menos trampas que el actual. El actual es un sistema que se inventa Elena Salgado en tiempos de José Luis Rodríguez Zapatero y está lleno de trampas, en el sentido más literal de la palabra, trampillas. El dinero entra por un lado y cuando sale por el otro lado está distribuido de una manera distinta. Y eso varias veces. Un ejemplo es este. Al de competitividad se le puso un tope que solo perjudica a Madrid, no a Cataluña.
Esto hace que Madrid, que es la primera comunidad en capacidad recaudatoria por habitante, al pasar todos esos filtros y tubos, aparece la duodécima en financiación por habitante. Y, hombre, creemos que eso está un poco descompensado.
Pero entiendo que usted no quiere que el principio de solidaridad autonómica se pierda.
El principio de solidaridad no significa que pases del puesto uno al 12, que haya 11 que reciban más que tú. Podría haber 11 que reciban lo mismo, pero no más. Porque entonces ya no es solidaridad.
Nosotros queremos que todo esto se evalúe y se hable sobre ello. Y que se haga al ritmo que se tiene que hacer si se quiere hacer dentro de esta legislatura.
¿Y cree que dará tiempo a hacerlo tal y como dijo el Gobierno, antes de que acabe el año?
A ver… Cuentan los que tienen experiencia en este tema de la financiación autonómica que no suele ser ni fácil ni rápido. Entiendo que no es fácil y me pongo en la piel de la ministra de Hacienda y sé que tiene un papel complicado, muy complicado. Para cualquiera lo sería. Pero no me parece imposible.
Ya se están produciendo choques entre los barones socialistas a cuenta de la financiación autonómica. ¿Se van a producir entre los presidentes autonómicos del PP?
Cuentan también los que han tenido experiencias previas en financiación autonómica que, como es lógico, cada uno está pensando más en su comunidad autónoma que en el alineamiento de partidos. Y me parece lógico, me parece bien que sea así. La presidenta y yo mismo, cuando se empiece a hablar de la financiación autónomica, vamos a pensar en lo que refleje mejor las necesidades y lo que corresponde a Madrid, por encima de cualquier otra cosa.
Dicho esto, en las cosas que he oído a Andalucía, Galicia, Murcia y Castilla y Léon veo que tenemos muchos elementos en común.
¿La región con la que más afinidades tiene Madrid, en términos de financiación autonómica, puede ser Cataluña? ¿Se ve negociando una estrategia común con la Generalitat?
Yo no he hablado con el conseller ni con nadie de la Generalitat. Ni tengo intención de hacerlo. Me da la impresión de que lo que le interesa a Cataluña es otra cosa. En la mesa de negociación con el Gobierno, lo que les interesa es un referéndum para la independencia, punto. Lo demás es accesorio.
Pero en financiación autonómica, el objetivo de Cataluña es algo que Madrid consideraría inadmisible, que es que se le perdone la deuda por el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA). Tiene 70.000 millones de euros, si no me equivoco. Eso es financiación extraordinaria que la región ha recibido y las demás no. Para nosotros sería inadmisible. Para toda España sería inadmisible.
Si se perdonara el FLA pasarían dos cosas gravísimas. Primero, que sería un agravio a muchas comunidades autónomas que con gran esfuerzo hemos hecho eficientemente gestión de nuestros recursos. Segundo, que perdonar el FLA sería conceptuado por los analistas financieros y las agencias de ‘rating’ como el equivalente a un ‘default’. Sería aceptar que hay una parte del Reino de España que no es capaz de honrar sus deudas con todas las consecuencias que eso tiene, que son muy serias.
No es algo que por justicia, igualdad entre regiones y prudencia financiera se pueda hacer. Es una barbaridad.
¿Qué sensaciones tiene ahora mismo respecto a la marcha de los fondos europeos? ¿Cómo marcha la cosa?
La cosa de los fondos europeos marcha lentamente porque el Gobierno va tardando mucho en cada paso, rodeado de una incertidumbre continua. Nadie sabe nada sobre el siguiente paso o de lo próximo que va a pasar. Pero llegados a estas alturas, lo que más me preocupa no es esto, sino el extremado dirigismo, la planificación extremadamente centralizada, de arriba abajo, por parte de los ministerios en la parte de los fondos que tenemos que gestionar las comunidades autónomas.
Son 21.000 millones de euros que nos dan troceados y en partículas minúsculas, que nos ordenan con absoluta precisión a qué dedicarlos. No es que nos den unos fondos para fomento del empleo indefinidos bajo tales parámetros. Es que nos dan unos fondos para gastar en determinados colectivos, en determinadas actuaciones que conducen a situaciones muy irreales y muy absurdas. Porque Madrid no tiene la misma situación en educación infantil o en servicios sociales, por ejemplo, que Galicia o Asturias. Pero nos obligan a todos a gastarlo igual.
¿Qué va a ocurrir? Que todo ese troceamiento va a conducir a infinitas convocatorias de minúsculas subvenciones que van a producir un efecto similar al de los vaporizadores de agua: partículas que se reparten y que unos meses después no han dejado huella. Todo esto hace que se pierda capacidad transformadora.
Recibir 70.000 millones de euros hubiera permitido al Gobierno tener ambición transformadora. Y no. Lo que está teniendo es ambición planificadora, y eso es otra cosa. Va a haber miles de pequeñas subvenciones para acciones que alguien en un ministerio ha decidido que son importantes y que no van a hacer que empresas, pymes, autónomos o familias cambien su situación de una manera potente.
Dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia están los PERTE. ¿Se está posicionando Madrid para captar alguno de ellos?
Los PERTE no están en marcha. Ni siquiera hay minúsculas convocatorias en marcha. No han explicado cómo se va a decidir qué asignación de fondos se va a producir, a quién y para qué. Powerpoints los que quiera, hay gigas y gigas de Powerpoints. Pero decisiones o explicaciones de cómo se van a tomar… Eso está produciendo un efecto nocivo en el tejido empresarial y productivo español.
Las empresas tenían unas ideas pensadas para 2022 que pueden ser de una manera si van a contar con fondos europeos u otra si no los tienen. Pero es que estamos ya en noviembre nadie les dice si los van a tener o no. Ni siquiera cómo podrían optar a ellos. Eso me parece que es una incompetencia por parte del Gobierno que ya va siendo muy grave.
La última vez que hablamos describió en varias ocasiones la gestión económica del Gobierno como “bolivariana”. ¿Cree que sigue siendo así?
En aquel momento, que fue en pleno confinamiento por la Covid, hubo muchos rasgos bolivarianos, y no solo en la parte de Podemos del Gobierno sino también en la del PSOE. Ese deseo de controlarlo todo… Se prohibieron los despidos, pero en realidad no se prohibió nada. Se pretendió aprovechar una crisis para darse una alegría ideológica al cuerpo.
Este Gobierno hace mucho populismo con el dinero. Se está haciendo adicto al reparto de subvenciones generalizadas. Eso lo hace como si no hubiera un mañana. Pero sí hay un mañana. Y el mañana empieza el día en el que tengamos que devolver toda la deuda que se está acumulando, que va ya por el 120% del PIB. Estamos en un escenario en el que el BCE te compra toda la deuda que le llevas y que el dinero no te cuesta dinero. Veremos qué es lo que pasa cuando el dinero vuelva a costar algo de dinero y cuando el Banco Central no compre toda la deuda.
Se está incurriendo en una irresponsabilidad fiscal con determinados programas
Se está incurriendo en una irresponsabilidad fiscal con determinados programas. Un ejemplo es el Ingreso Mínimo Vital (IMV), un programa en el que se considera un fracaso no haber llegado a un objetivo determinado de personas. Eso no está bien concebido. El IMV le tiene que llegar a todas las personas que lo necesiten, que cumplan los requisitos. Si los cumplen 800.000, serán 800.000. Pero no se puede considerar un fracaso que no haya llegado a millón y medio. ¿Cuál es el objetivo, dar la ayuda en la naturaleza que querías dar o que haya mucha gente que dependa del Gobierno?
Muchas veces da la sensación de que lo que se busca es que haya mucha gente cuya vida dependa del Gobierno. Y esos son rasgos del socialismo del siglo XXI.