Pablo Hernández de Cos, gobernador del Banco de España, ha anticipado este miércoles una revisión significativa de la inflación prevista para 2022 para el conjunto del área del euro y para la economía española, debido fundamentalmente al mantenimiento de los precios elevados de la energía, informa Europa Press.
Después de que la inflación volviera a sorprender al alza en diciembre (+6,5% en España) y enero (+6,1%) y los precios de la energía se mantuvieran elevados, desde el organismo se anticipa esta revisión significativa de la inflación prevista para 2022.
"En comparación con las previsiones de diciembre, los riesgos para las previsiones son al alza, sobre todo en el corto plazo", ha apuntado el gobernador durante la presentación del Informe Económico y Financiero de Esade. Hernández de Cos ha advertido de algunas "incertidumbres", como los cuellos de botella o las dificultades en los aprovisionamientos de gas, electricidad e incluso del petróleo, que tienen que ver mucho con las tensiones geopolíticas.
Un tercer foco de incertidumbre surge de una eventual realimentación entre los aumentos de los precios y los de los salarios, lo que se conoce como 'efectos de segunda vuelta'. No obstante, ha indicado que los reducidos niveles de inclusión de cláusulas de indiciación salarial a la evolución de los precios en los convenios colectivos, en comparación con períodos anteriores, señalan que, al menos a corto plazo, este tipo de efectos serían contenidos.
Sobre esto, el gobernador ha defendido una especie de "pacto de rentas" entre los agentes sociales para evitar una espiral de incrementos de salarios y precios que puedan generar la pérdida de competitividad para la economía.
Incremento de salarios
Además cree que, si bien incrementos excesivos y generalizados de los salarios serían, en el contexto actual, contraproducentes, aumentos consistentes con la evolución de la productividad y la demanda de las empresas a nivel individual son "claramente deseables".
Pese a todo esto, el gobernador ha señalado que, en cuanto a la perspectiva a medio plazo, ha aumentado la probabilidad de que la inflación se sitúe en el 2% en el medio plazo. "No se ven riesgos todavía de que se mantengan persistentemente por encima", ha asegurado.
No obstante, el gobernador del Banco de España ha admitido que el nivel de incertidumbre es muy elevado, en particular debido a las tensiones geopolíticas, habida cuenta de que actualmente el mundo atraviesa un momento marcado por la creciente tensión del conflicto entre Rusia y Ucrania.
Dado el alto grado de incertidumbre, Hernández de Cos ha insistido en que ahora más que nunca la política monetaria necesita mantener la flexibilidad y las opciones abiertas. "Estamos preparados para ajustar todos nuestros instrumentos, según proceda, para asegurar que la inflación se estabilice en el objetivo del 2% a medio plazo", ha asegurado.
Según ha apuntado el gobernador, la dinámica de los precios es uno de los elementos más importantes que han sucedido en los últimos meses. Y es que, aunque en un primer momento se llegó a plantear como un fenómeno puramente transitorio, la realidad es que la duración del episodio está siendo más importante de lo esperado y ha sido en gran medida "inesperado", según ha admitido el gobernador.
El gobernador ha detallado que alrededor de un 60% de este episodio inflacionista en el área del euro tiene que ver con el incremento de la energía, aunque también la inflación subyacente y los precios de la energía también han ido contribuyendo de una manera creciente a este fenómeno.
Mercado del gas
El primer factor que explica el incremento de precios está vinculado a la intensa desaceleración de los precios de numerosos bienes y servicios que pudo observarse en los primeros meses de la pandemia.
El segundo factor explicativo de la aceleración de la inflación está vinculado con la intensa recuperación de la actividad económica tras los peores momentos de la pandemia, en la medida en que ha conllevado un fuerte incremento de la demanda global, que está siendo particularmente intenso en el caso de algunos grupos de bienes y que está provocando los denominados 'cuellos de botella' ante la limitación de la oferta.
El tercer factor es el encarecimiento, de una magnitud sin precedentes, de los precios de la electricidad en los mercados mayoristas europeos. Este se explica, principalmente, por el fuerte aumento del precio del gas desde comienzos de 2021 y, en menor medida, por el incremento de los precios de los derechos de emisión de gases de efecto invernadero.
La duda es ahora, según el gobernador, hasta cuándo van a persistir estos factores en el tiempo. En este sentido, ha avanzado que los efectos base vinculados con la pandemia van a dejar de ser relevantes a partir de la primavera de esta año, lo que debería contribuir a moderar las tasas de inflación.
En cuanto a los cuellos de botella, cabría esperar que a medida que la oferta se vaya adaptando a la demanda existente se debería producir una corrección de los aumentos de precios relacionados, aunque ha advertido de que hay una "enorme incertidumbre" sobre el patrón temporal de esta corrección.
Por último, Hernández de Cos ha señalado que si se utilizan los mercados de futuros como una aproximación de lo que puede pasar con los precios de la energía, a día de hoy se observa una pendiente negativa para los mismos.
Estados Unidos
El gobernador ha querido poner el foco en las llamativas las diferencias con la evolución de los precios en Estados Unidos que, en todos sus componentes, mostraron un mayor crecimiento, en comparación con el área del euro.
Entre diciembre de 2021 y diciembre de 2019, los precios de la energía, alimentos, bienes industriales no energéticos y servicios aumentaron un 20,3%, 10,4%, 12,5% y 5,3%, respectivamente, en este país.