El Fondo Monetario Internacional (FMI) se suma a los órganos que mejoran su previsión económica para España. En su último análisis, el ente prevé que el PIB español crezca un 1,5% en 2023, cuatro décimas más que en el último vaticinio de esta organización.
Con todo, estas cifras siguen lejos de las previsiones que sostiene el Gobierno de España, que indican que el PIB de 2023 crecerá, al menos, un 2,1%. Además, de vuelta al FMI, las mejoras del crecimiento económico de este año anticipan una menor subida para 2024. Según su informe Global Prospects and Policies, el próximo año el PIB crecerá un 2%, cuatro décimas menos de lo que se había anticipado en el análisis de enero.
Con todo, a España le irá mejor que al conjunto de las economías avanzadas, que en 2023 y 2024 se espera que crezcan de media un 1,3% y un 1,4%, respectivamente. De hecho, España crecerá más que Francia o Italia.
Decrecimiento
Sin embargo, las mayores preocupaciones están en Alemania. El FMI sostiene que la economía germana entrará en tasas negativas globales este año (con un decrecimiento del 0,1% del PIB), igual que Reino Unido (que cae tres décimas de PIB).
De vuelta a los datos nacionales, el FMI pronostica que la inflación española se moderará al 4,3% durante el presente año, por encima de previsiones como la del Banco de España (que estima un 3,7%). Mientras, la tasa de paro bajará tres décimas respecto a 2022, hasta el 12,6%.
También en precios este 2023 va a ser mejor para nuestro país que para las economías avanzadas (la inflación se espera que esté en 5,6%) y los países del euro (5,3%). La tortilla se dará la vuelta en 2024, cuando el IPC español llegará al 3,2%, por encima de los territorios citados.
En términos generales, el FMI espera que la economía global crezca un 2,8%, una décima menos de lo esperado, gracias al empuje de las economías emergentes. En términos generales, la inflación se va a relajar en todos los terrenos, aunque seguirá elevada.
El ente insiste en que la incertidumbre es la norma del futuro. Todavía pesarán las consecuencias de la Covid y continuarán los efectos de la guerra de Ucrania. Sin embargo, ahora se suman los potenciales efectos que en los mercados financieros pueden tener los desplomes de bancos regionales en Estados Unidos y el de Credit Suisse.