La delicada situación que vive el Reino Unido por la inflación ha llevado al Gobierno a buscar un acuerdo con los bancos para evitar embargos hipotecarios y, de paso, echar un cable a las familias más afectadas. Para ello, y tras una reunión entre el Ejecutivo y el sector financiero, han acordado una moratoria de 12 meses para las ejecuciones y, también, la posibilidad de llevar a cabo aplazamientos y renegociaciones sin coste para los clientes. 

Se trata de una respuesta urgente ante el impacto que está teniendo la subida de tipos ejecutada por el Banco de Inglaterra que esta misma semana los ha elevado otro medio punto hasta el 5%. Todo para intentar frenar una inflación desbocada que está ya en el 8,7% mientras que la subyacente se situó en mayo en el 7,1% 

Así que ante esta situación, informa Europa Press, y tras una reunión mantenida este viernes en Downing Street con representantes del sector bancario, el ministro de Finanzas del Reino Unido, Jeremy Hunt, ha anunciado que había logrado acordar "tres cosas muy importantes".

Las medidas

En primer lugar, el responsable del Tesoro británico ha explicado que "cualquier persona podrá hablar con su banco o su prestamista hipotecario sin impacto alguno en su historial crediticio".

Asimismo, Hunt ha señalado que aquellas personas "angustiadas" por no poder hacer frente al pago de su hipoteca podrán cambiar el préstamo para pagar sólo intereses o extender el plazo de la misma "y si lo desean, volver a su acuerdo hipotecario original dentro de los seis meses (siguientes)".

"Creo que eso le dará mucha comodidad a la gente y evitará que se preocupen por tener que negociar con sus bancos cuando están preocupados por su situación financiera", ha afirmado.

En último lugar, el ministro de Finanzas del Reino Unido ha anunciado que las personas en riesgo de perder su vivienda podrán beneficiarse de un periodo de al menos 12 meses antes de que las entidades ejecuten el embargo por impago hipotecario.

Carencia 

"Los bancos y prestamistas hipotecarios tienen una serie de alternativas. Lo último que quieren hacer es embargar una casa", ha subrayado Hunt al anunciar que "en esa situación extrema acordaron que habrá un período mínimo de 12 meses antes de que haya un embargo forzoso".

Con estas medidas el propio Hunt ha reconocido en Sky News, que su Gobierno es consciente de la presión que sufren las familias. Sin embargo, también ha dicho asumir que están "absolutamente comprometidos en apoyar al Banco de Inglaterra a hacer lo que sea necesario" para reconducir la subida de los precios.