Pedro Sánchez ha respondido a la exministra francesa de Ecología, Ségolène Royal, que en las últimas horas ha criticado los tomates españoles de la categoría 'bio'. A juicio del presidente del Gobierno, el "tomate español es imbatible", y ha invitado a la socialista a venir a España para probar cualquiera de las variedades que aquí se cultivan.
De este modo, el presidente del Gobierno defiende el producto patrio ante una crítica que considera "infundada" por parte de la exministra francesa. Unas declaraciones en las que aseguraba que "los tomates 'bio' españoles son incomibles, no respetan las normas francesas y no deberían estar en las estanterías".
Unas palabras que pronunciaba en plena ola de protestas del sector agrícola francés, y en el marco de una entrevista en la que defendía los productos 'made in Francia'. Su opinión ha causado un gran malestar en el sector agrícola español.
También ha salido en defensa del sector la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, quien ha destacado que los ataques de la francesa son "impropios" de personas que "han estado al frente de las instituciones" del país vecino.
La polémica llega apenas horas antes de que el ministro de Agricultura, Luis Planas, se reúna con el sector agrícola en España para tratar de frenar la convocatoria de una huelga en el campo. Un contagio de las protestas que se viven en el resto de Europa y que este jueves se están viviendo con virulencia en Bruselas.
El epicentro de esta revolución del campo es Francia, y allí los sindicatos han pedido ya a sus bases que rebajen el nivel de las protestas callejeras. Lo han hecho después de que el primer ministro, Gabriel Attal, haya puesto encima de la mesa medidas para compensar a los agricultores.
Entre otras, Attal ha prometido consagrar por ley el principio de soberanía alimentaria y reforzar el control de las importaciones. Además, ha garantizado que Francia dejará de ir por delante de la legislación europea y dejará de imponer a sus agricultores una reglamentación más estricta que la exigida por la Unión Europea.
En concreto, Attal se ha comprometido a frenar el Plan Ecophyto, un proyecto cuyo objetivo era reducir el uso de productos fitosanitarios en un 50% para 2025 y eliminar el glisofato de los campos franceses.
Sánchez y Macron
Unas protestas que se han cebado con los transportistas españoles, a los que se les han vandalizado camiones y se les ha tirado la mercancía. Todo ello después de bloquearlos en las carreteras para impedir su acceso al país durante días.
Precisamente sobre este tema -informa Europa Press- han podido hablar el presidente Pedro Sánchez y el presidente francés, Emmanuel Macron, en Bruselas. Sánchez ha remarcado su respeto al derecho de los agricultores a manifestarse "pacíficamente", pero ha condenado el ataque a los transportistas y también a los productores españoles.
Dice el presidente del Gobierno que los transportistas españoles "están haciendo su trabajo desde la legalidad y, con su esfuerzo, están abasteciendo a mercados y a los hogares europeos".
"Así lo hemos hecho saber a las distintas autoridades, tanto francesas como instituciones comunitarias", ha afirmado el jefe del Ejecutivo español.
El presidente ha insistido en que "no hay una ventaja competitiva" de los productos españoles respecto a ningún otro en el mercado interior, y ha enfatizado que se aplican las mismas reglas en Francia, en España, en Portugal, en Italia, en Holanda y en el resto de Estados miembros.