Varias personas en la terraza de un bar.

Varias personas en la terraza de un bar. Ricardo Rubio Europa Press

Macroeconomía

Las presiones salariales y la falta de mano de obra preocupan a las empresas a pesar de que crecen sus ventas

Hostelería, agricultura y construcción son los sectores que aquejan mayor dificultada para encontrar personal cualificado.

11 junio, 2024 02:21

Las empresas notan la buena marcha de la economía. La facturación, los márgenes y el empleo crecen y las perspectivas a corto plazo son positivas. Sin embargo, achacan problemas que empañan su devenir: las presiones salariales -derivadas precisamente de la crisis de precios- y la falta de mano de obra en determinados sectores.

Según la última Encuesta a las empresas españolas sobre la evolución de su actividad del Banco de España, las compañías experimentaron un notable repunte de su facturación en el segundo trimestre, después de tres trimestres a la baja. El porcentaje de empresas cuyas ventas aumentaron fue del 32,3%, 10,1 puntos más que en el trimestre anterior. Para el periodo entre julio y septiembre las perspectivas son igualmente positivas.

Sin embargo, ese crecimiento no se distribuyó de manera uniforme. Mientras que la hostelería y las actividades administrativas lideraron el aumento de ventas, la agricultura y el comercio continuaron sumidos en una tendencia negativa, acumulando nueve y diez trimestres consecutivos de caídas, respectivamente.

En cualquier caso, y a pesar del aumento generalizado de la facturación, las empresas siguen enfrentando desafíos significativos. La escasez de mano de obra se ha convertido en una preocupación creciente, con un 41,1% de las empresas reportando dificultades para encontrar personal cualificado, superando por primera vez al aumento de los costes energéticos como principal factor limitante para su actividad.

Esta dificultad para encontrar personal cualificado está afectando especialmente a sectores como la hostelería, la agricultura y la construcción, donde más del 50% de las empresas declaran tener problemas para cubrir sus necesidades de personal.

Trabajadora en una fábrica juguetera.

Trabajadora en una fábrica juguetera. Europa Press

La escasez de mano de obra está ejerciendo una presión al alza sobre los salarios, si bien esta es cada vez menor. El 68% de las empresas encuestadas prevén que los costes laborales aumentarán en el próximo año, siete puntos menos que en el primer trimestre. No obstante, las empresas que enfrentan mayores dificultades para encontrar trabajadores son las que anticipan mayores incrementos en sus costes laborales.

Con todo, las perspectivas para el próximo trimestre son optimistas. Las empresas esperan que la facturación seguirá creciendo y las presiones inflacionistas se moderarán. De hecho, el 47,2% de las empresas (14,3 puntos menos que en el trimestre anterior) experimentaron un incremento de los precios de sus consumos intermedios; mientras que el 25,1% (11,5 puntos menos) declararon haber subido sus precios.

Datos

Los datos, en cualquier caso, respaldan en buena medida las perspectivas positivas. En abril se registró un notable aumento en la creación de nuevas empresas, con un total de 11.752 sociedades mercantiles constituidas. Esta cifra representa un incremento interanual del 36,3% y marca el mayor número de empresas creadas en un mes de abril desde 2007, según datos del INE.

El capital suscrito para la creación de estas empresas superó los 483 millones de euros, lo que supone un aumento del 72,1% respecto a abril de 2023. Además, el capital medio suscrito por empresa también experimentó un incremento significativo, alcanzando los 41.100 euros, un 26,3% más que en el mismo mes del año anterior.

Ocurre lo mismo con los registros de la Agencia Tributaria (AEAT), si bien estos también respaldan las cautelas de los empresarios. En abril, las ventas de las grandes empresas crecieron un 0,4% respecto al mismo mes de 2023, un ritmo menor que en marzo. Sin embargo, el promedio de marzo y abril muestra un crecimiento del 0,9%, ligeramente superior al inicio del año. Esta volatilidad se debe a las fluctuaciones en las exportaciones.

Más al detalle, las ventas interiores aumentaron un 1,4%, gracias a la recuperación de las ventas de consumo (3,6%) y la vuelta al crecimiento de las ventas de inversión (2,7%). En este último segmento, destaca el fuerte aumento en construcción (14,2%), que contrarrestó la caída en ventas de equipo y software (-2%).

Personas en un centro comercial, en una imagen de archivo.

Personas en un centro comercial, en una imagen de archivo. Tomàs Moyà Europa Press

En cambio, las exportaciones cayeron un 2,5% en abril, revirtiendo el repunte de marzo. Esta disminución se debió tanto a la menor expansión de las exportaciones a terceros países como al mayor descenso en las exportaciones a la UE (-6,2%).

En cuanto al mercado laboral, el crecimiento del número de perceptores de rendimientos del trabajo -es decir, los trabajadores- se moderó ligeramente al 2,7% en abril, mientras que el rendimiento bruto medio -un indicador que indica la evolución de los salarios- se mantuvo estable en el 3,6%.

Lo cierto es que, una vez pasado el primer trimestre, las alzas salariales parecen ir dando un respiro. Los salarios pactados en convenio experimentaron en mayo una subida del 2,96%. Este incremento, aunque superior al registrado en abril (2,92%), se sitúa por debajo del IPC adelantado de mayo (3,6%) y de la recomendación del 3% del V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC).

Echando la vista atrás, el coste por hora trabajada experimentó un fuerte incremento del 7,5% en el primer trimestre en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este aumento, el mayor desde el inicio de la pandemia, marcó el undécimo trimestre de alzas interanuales y superó en 1,5 puntos el incremento registrado al cierre de 2023.