María Jesús Montero, en un acto del PSOE.

María Jesús Montero, en un acto del PSOE. Francisco J. Olmo Europa Press

Macroeconomía

Las comunidades siguen disparando su gasto para tener mayor colchón cuando vuelvan las reglas fiscales

Hasta mayo, sus gastos crecieron un 5,93% respecto al mismo periodo del año anterior, mientras que los ingresos lo hicieron sólo un 3,2%.

26 julio, 2024 02:00

Las comunidades autónomas siguen aumentando su gasto mes a mes, superando con creces los desembolsos de hace un año. Sólo en los cinco primeros meses del año han superado los 82.000 millones de euros, un 5,93% más que en 2023. Eso está agrandando su déficit, que ya se sitúa en el 0,3%. Sin embargo, también les sirve para contar con más margen de cara a la vuelta de las reglas fiscales.

Los datos del Ministerio de Hacienda constatan que las administraciones territoriales continúan gastando por encima de sus ingresos. De hecho, mientras que los desembolsos han crecido ese 5,93%, las entradas de dinero sólo lo han hecho en un 3,2%.

Este desigual comportamiento está provocando que la inmensa mayoría de las CCAA ya hayan incurrido en déficit. De hecho, sólo tres comunidades de régimen común tienen superávit: Asturias, con un 0,06%; Extremadura, con un 0,03%, y Valencia, con un 0,07%. Las dos de régimen foral, Navarra y País Vasco, también presentan un resultado positivo.

En cifras absolutas, el déficit de las CCAA alcanza los 4.696 millones de euros. Un tercio del total lo tiene Andalucía, cuyo balance negativo hasta mayo es del 0,75%.

Sin embargo, en términos relativos es Murcia la región en peor situación, con un déficit del 1,6%, seguida de La Rioja (0,92%) y Baleares (0,86%). Esta última es de las pocas comunidades que ha reducido sus gastos (un 1,48%), si bien los ingresos han caído todavía más (6,05%).

Pero, en términos generales, es evidente que las administraciones autonómicas vienen gastando más. ¿Por qué? Más allá de que lo puedan necesitar para mantener o mejorar sus servicios públicos o para afrontar el pago de intereses de la deuda, lo cierto es que también funciona como una estrategia de cara a los próximos años, ya que a partir de 2025 entran en funcionamiento las nuevas reglas fiscales europeas.

Pero, a diferencia de lo que ocurría con las vigentes antes de la pandemia —y todavía en vigor, aunque no operen—, lo importante ahora no será el déficit, sino la evolución del gasto. En concreto, del gasto neto de medidas de ingreso, una variable que se considera más clara a la hora de evaluar la sostenibilidad de unas cuentas.

¿Qué es el gasto primario neto de medidas de ingreso?

Se trata de un concepto utilizado en el ámbito de la política fiscal y presupuestaria, especialmente en el contexto europeo. Se refiere a la variación del gasto público total, excluyendo los intereses de la deuda y corregido por el efecto de las medidas que afectan a los ingresos públicos.

Este concepto es clave para evaluar la sostenibilidad de las finanzas públicas y el cumplimiento de las reglas fiscales europeas. Un aumento del gasto primario neto de medidas de ingreso puede indicar una política fiscal expansiva, mientras que una disminución sugiere una política más restrictiva.

Como la nueva regla empezará a funcionar a partir del año que viene, las CCAA están ensanchando su gasto en este año de laxitud fiscal para partir de un suelo más alto a partir de 2025. Es decir, están creando una suerte de colchón para que, aunque se les imponga un incremento reducido de los desembolsos, su situación ya sea de un elevado gasto.

En resumen, están gastando más en previsión de que futuras restricciones. Una estrategia que a corto plazo supone ese aumento del déficit y da al traste con el último plan de estabilidad en vigor, que exigía a las administraciones autonómicas cerrar en ejercicio en equilibrio presupuestario. Algo que ya parece misión imposible.