Amancio Ortega, Sandra Ortega, Juan Abelló, Rafael del Pino Calvo-Sotelo, Alicia Koplowitz y Tomás Olivo, algunas de las personas más ricas de España según la Lista Forbes.

Amancio Ortega, Sandra Ortega, Juan Abelló, Rafael del Pino Calvo-Sotelo, Alicia Koplowitz y Tomás Olivo, algunas de las personas más ricas de España según la Lista Forbes. EE

Macroeconomía

Sólo hay 20 personas en España con "suficiente dinero para vivir 100 vidas" a los que Sánchez subiría los impuestos

En 2022, la Agencia Tributaria registró 852 personas con un patrimonio superior a los 30 millones de euros, máximo de la serie histórica.

9 septiembre, 2024 02:27

Pedro Sánchez anunció este miércoles que aprobará nuevos impuestos a las grandes fortunas. Durante su discurso de apertura del curso político, el presidente del Gobierno afirmó que gravarán "a quienes ya tienen en el banco suficiente dinero para vivir cien vidas". ¿El objetivo? "Acotar sus privilegios desproporcionados" en favor "de las clases medias y los trabajadores". 

Sin embargo, la expresión utilizada deja muchas dudas, entre ellas a quién afectará este nuevo tributo. ¿Quién tiene en el banco dinero para vivir cien vidas? Según los cálculos realizados por EL ESPAÑOL-Invertia, apenas la veintena de personas que copan las primeras posiciones de la Lista Forbes y otras similares que recogen el ranking de las grandes fortunas. Todos aquellos con un patrimonio que supera los 1.600 millones de euros.

La cifra no es aleatoria. El último informe de riqueza de UBS (Global Wealth Report) sitúa el patrimonio medio por adulto en España en los 225.675 euros. Por tanto, los 1.600 millones son el resultado de operar esa cantidad, una esperanza de vida media de 80 años y una inflación anual del 2%. En suma, supone que el impuesto de Sánchez podría afectar a Amancio Ortega y otras 19 personas más.

Conociendo los posibles candidatos a ser objeto del nuevo impuesto de Sánchez, queda por saber en qué consistirá dicho tributo. Y es que el presidente del Gobierno fue parco en los detalles de una nueva figura fiscal que llega poco después de la armonización del impuesto sobre el patrimonio vía impuesto temporal sobre las grandes fortunas.

El nuevo tributo será, en cualquier caso, el cuarto gran impuesto de la era Sánchez, tras el citado sobre las grandes fortunas y los dos aprobados para gravar los beneficios de la banca y las empresas energéticas.

Ni un millar

Dejando de lado la literalidad de la expresión, lo cierto es que el número de millonarios en España con una riqueza en los tramos más altos de las métricas habituales tampoco es muy elevado. En 2022, la Agencia Tributaria registró 852 personas con un patrimonio superior a los 30 millones de euros, nuevo récord histórico tras un incremento del 2,5% respecto al año anterior.

Sin embargo, sólo el 27,6% (235 personas) pagaron el impuesto sobre el patrimonio, la cifra más baja de la serie histórica. En ejercicios anteriores, esa proporción se situaba alrededor del 35%.

El descenso en la recaudación y el número de contribuyentes se debe, en gran medida, a las bonificaciones fiscales implementadas por algunos gobiernos autonómicos del PP, especialmente en Madrid.

Para contrarrestar estos descuentos, el Gobierno central introdujo a finales de 2022 el impuesto de solidaridad a las grandes fortunas, diseñado específicamente para evitar la pérdida de ingresos provocada por dichas bonificaciones.

En la actualidad, existen dos impuestos paralelos sobre la riqueza. Por un lado, el tradicional impuesto sobre el patrimonio, de ámbito estatal pero cedido a las CCAA. Afecta a quienes tienen una riqueza superior a los 700.000 euros, con una exención de hasta 300.000 euros en la vivienda habitual.

El segundo, el nuevo impuesto de solidaridad, tiene un umbral más elevado, gravando a quienes poseen más de 3,7 millones de euros en riqueza neta, con una deducción total en caso de residir en una comunidad donde se aplique el tributo original.

Con los datos disponibles, es complicado saber cuántas personas se sitúan por encima del umbral de los 3,7 millones de euros -que podría ser el baremo de Sánchez para considerar que una persona puede vivir 100 vidas-, ya que se encuentra a mitad del tramo entre 1,5 y los 6 millones. Desde ese tramo, se contaban dos años atrás 74.541 personas. Y, a partir de los 6 millones, 10.099 declarantes.

Los datos de la Agencia Tributaria revelan que en 2022 había 230.365 contribuyentes obligados a declarar por su riqueza. No obstante, sólo el 80,4% de ellos pagaron el impuesto sobre el patrimonio, esto es, unas 185.000 personas. El resto, más de 45.000 contribuyentes, se beneficiaron de las exenciones autonómicas, lo que marca la menor proporción de pagadores en la serie histórica.

La recaudación por el impuesto de patrimonio también se vio afectada. Mientras que en 2021 se recaudaron 1.352 millones de euros, en 2022 la cifra disminuyó en más de 100 millones, una caída directamente vinculada a las bonificaciones fiscales implementadas en comunidades como Madrid y Andalucía.

En 2022, Andalucía se unió a Madrid en la aplicación de una bonificación del 100% en el impuesto sobre el patrimonio. Esto permitió que los 23.486 declarantes de Madrid y los 12.707 de Andalucía no pagaran el tributo, lo que redujo significativamente la proporción de contribuyentes que abonaron el impuesto.

A pesar de estas bonificaciones, el recién implementado impuesto de solidaridad logró recaudar 623 millones de euros en su primer año, siendo Madrid la principal fuente de ingresos debido a la alta concentración de grandes fortunas en la capital.

Ante esta situación, comunidades como Madrid y Andalucía han reconsiderado su postura y decidieron en 2023 recuperar el impuesto original para retener los ingresos que, de otro modo, irían al Estado a través del nuevo tributo de solidaridad.

Distribución

De acuerdo con los datos de la Agencia Tributaria, el patrimonio medio declarado en España en 2022 superó los 3,7 millones de euros, tras aumentar un 2,3% frente al año anterior.

Las diferencias regionales en la distribución de la riqueza son notables. En Aragón, por ejemplo, la riqueza media declarada fue de 1,7 millones de euros, mientras que en Madrid superó los 11 millones, la cifra más alta de todas las comunidades. En Galicia, los declarantes registraron una riqueza media de 6,8 millones, y en Andalucía, de 3,8 millones.

En total, los contribuyentes españoles declararon patrimonio por un valor de 864.939 millones de euros en 2022, un crecimiento del 2% respecto al año anterior. La mayor parte de esta riqueza provino del capital mobiliario, que representó el 75% del patrimonio total. Esta categoría incluye dividendos y plusvalías empresariales.

Los bienes inmuebles supusieron el 19% del total, mientras que los seguros, rentas y actividades económicas representaron un 2% y 1,4%, respectivamente. Además, 1.515 personas declararon poseer criptomonedas por un valor total de 1.800 millones de euros.