La extensión de la rebaja del IVA y la reforma del subsidio por desempleo costarán 1.500 millones al Estado
El Banco de España señala que sus cálculos sobre el impacto de ambas medidas están sujetos a una "considerable incertidumbre".
18 septiembre, 2024 02:27La extensión de la rebaja del IVA a los alimentos básicos y la reforma del subsidio de desempleo tendrán un impacto en las cuentas del Estado que rozará los 1.500 millones de euros. Según el Banco de España, ambos cambios "supondrían un deterioro del saldo de las Administraciones Públicas ligeramente inferior a 0,1 puntos porcentuales de PIB" durante los próximos tres años, si bien la primera de las medidas decaerá a finales de 2024.
Así se desprende del nuevo Informe Trimestral del regulador bancario, que también señala que es precisamente la extensión de la rebaja del IVA a la cesta de la compra —y la ampliación del tipo 0% al aceite de oliva— lo que ha llevado a rebajar su previsión de inflación para el final de este ejercicio al 2,9% (una décima menos que su estimación de junio).
Ángel Gavilán, director general de Economía y Estadística del regulador, ha estimado que la extensión de la rebaja del IVA a los alimentos básicos tiene un impacto presupuestario de entre 800 y 900 millones de euros. Dentro de esta cantidad se encuentra el cambio sobre el aceite de oliva, con un coste de 150 millones.
Como en anteriores ocasiones, el Banco de España ha señalado que este tipo de medidas "relativamente generalizadas" no permiten que el apoyo fiscal llegue en toda su intensidad a los segmentos "más vulnerables" de la población. El pasado año, la rebaja sobre el IVA supuso que el Estado dejara de ingresar 2.452 millones de euros.
Si se descuenta el impacto de las rebajas fiscales a los alimentos, el resultado es que la reforma del subsidio por desempleo tendrá un coste para las arcas públicas que puede ascender hasta los 600 millones de euros. La cifra queda muy lejos de las previsiones del Ministerio de Trabajo, que estima un impacto anual de 64 millones y ahorros a partir de su tercer año.
Sin embargo, cabe destacar que coincide en buena medida con la primera previsión del departamento de Yolanda Díaz. Cuando aprobó la reforma a finales de 2023, el coste estimado de la medida era de 648 millones. Sin embargo, como la norma decayó en el Congreso de los Diputados, el Gobierno tuvo que aprobarla de nuevo y, esta vez, lo hizo con varias modificaciones.
Dichos cambios consistían, básicamente, en incentivos para la vuelta de las personas sin trabajo al empleo, gracias a una senda de ayudas descendente y a la compatibilidad entre el empleo y el cobro de la prestación. No obstante, el Banco de España cree más probable un impacto como el estimado con la primera versión de la reforma.
En cualquier caso, el regulador también considera este extremo, al señalar que su estimación de impacto económico "está sujeta a una considerable incertidumbre". El motivo de esa incertidumbre es, precisamente, el "impacto potencial" de esa mejora de la transición al empleo por la posibilidad de compatibilizar salario y subsidio o prestación por desempleo.
"La magnitud de este impacto podrá estimarse con mayor precisión en los próximos trimestres a medida que se disponga de más evidencia al respecto", explica el Banco de España en su informe.
No obstante, cabe recordar que, mientras que la rebaja del IVA de los alimentos tiene fecha de caducidad —el único cambio permanente es que el aceite de oliva se mantendrá con un IVA superreducido, aunque subirá al 5%—, la reforma del subsidio por desempleo sí continuará en el tiempo.