Un dictamen histórico. La Comisión Europea obliga a Apple a pagar 13.000 millones de euros de impuestos no cobrados por Irlanda gracias a acuerdos fiscales “ilegales”. Esta ‘sanción’, que representa algo más de una cuarta parte del beneficio de la compañía en 2015 y casi una quinta parte del gasto público irlandés del pasado año, acelera los planes europeos para perseguir la ingeniería fiscal de grandes multinacionales. Amazon, Mcdonald´s y otros gigantes esperan noticias.
La Comisión Europea ha rechazado el acuerdo entre Apple e Irlanda por representar una ayuda pública ilegal al no dar acceso a esas condiciones a otras muchas compañías. Ese pacto es conocido como ‘tax ruling’: la alianza entre las autoridades de un estado y una empresa para fijar las condiciones fiscales por su actividad en el país. Hay sólo una condición para que sean legales: que no exista trato de favor y, por tanto, que tengan acceso a esos beneficios todas las compañías. Este caso, según la Comisión, no la cumplía.
Esos acuerdos fiscales a dos partes son habituales entre las grandes compañías multinacionales. El llamado ‘Luxleaks’ permitió descubrir acuerdos que sólo Luxemburgo había suscrito con casi 340 multinacionales entre 2002 y 2010, entre ellos Pepsi, Ikea, AIG o Deutsche Bank, que permitieron a las empresas rebajar drásticamente sus impuestos, hasta menos de un 1%. Y esta decisión de la Comisión los pone en la picota.
Amazon y McDonald´s, bajo lupa
Una de las compañías que está bajo la lupa es el gigante del comercio electrónico Amazon. Su acuerdo fiscal con Luxemburgo está siendo investigado desde el año 2014. Ya en enero de 2015, la Comisión advertía: el acuerdo “probablemente” constituía una ayuda estatal ilegal.
Pero no es la única. La franquicia de comida rápida McDonald´s es otra que espera el dictamen de Vestager y su equipo. Según las primeras pesquisas hechas públicas el pasado año, el acuerdo fiscal con Luxemburgo permitió a la matriz de la compañía no pagar ningún impuesto de sus ‘royalties’ europeos. Sólo en 2013, esta división luxemburguesa registró un beneficio de más de 250 millones de dólares.
Sanciones anteriores
¿Y el resto? Hay más casos con sanciones o acuerdos ‘extrajudiciales’ para pagar impuestos no recaudados. En octubre de 2015, la Comisión Europea dictaminaba que las ventajas fiscales concedidas por Holanda y Luxemburgo a la multinacional del café Starbucks y al fabricante de coches Fiat eran también ayudas públicas ilegales. Les hacía pagar a cada una de ellas una cantidad que rondaba los 30 millones de euros, muy lejos de los 13.000 exigidos a Apple.
Pero hay más países que han sido señalados directamente por la Comisión en los últimos meses. En enero, Vestager anunció la conclusión de una investigación sobre las alianzas fiscales de Bélgica con las que reducía hasta en un 90% de la factura tributaria de muchas empresas. En total eran 35, en su mayoría de la UE, que pagarán 700 millones de euros.
Más allá de estos dictámenes, en Europa ha habido movimientos de las grandes compañías tecnológicas para llegar a acuerdos extrajudiciales con los que abonar parte de los impuestos no pagados en determinados países. Es el caso del suscrito por la propia Apple con la Fiscalía italiana por el que abonó 318 millones de euros (desde los casi 900 millones que, según la investigación, habían dejado de pagar entre 2008 y 2013).
El otro acuerdo ‘extrajudicial’ es el firmado por Google en Reino Unido a principios de este año. El gigante tecnológico llegó a un acuerdo con la autoridad fiscal británica para abonar 130 millones de libras esterlinas.
¿Y en España?
Durante su comparecencia, la comisaria de Competencia ha llamado a otros países europeos a tomar medidas para conseguir que las multinacionales realmente paguen más impuestos. “Otros países pueden mirar esta investigación, la información que tenemos y puede requerir a Apple que pague más impuestos en cada país”, ha apuntado.
¿Qué ocurre en España? Excepto Amazon, las grandes multinacionales tecnológicas tienen una estructura fiscal similar. Aunque se desconoce (porque no hay obligación de hacerlo público, aunque sí de compartir la información entre los países miembros) si existen ‘tax ruling’ con alguna de estas compañías.
Apple no se ha enfrentado a ninguna sanción económica de Hacienda en los últimos ejercicios fiscales, pese a haber recibido inspecciones de todos los impuestos. A la red social Facebook, la cuarta que mayor capitalización bursátil acumula en el mundo, le ocurre algo similar: ni una sola sanción y ni una sola inspección.
En el caso de Google, la Agencia Tributaria ha iniciado una investigación por supuesta evasión fiscal. El pasado mes de junio un equipo de inspectores acudió a las dos sedes de la compañía del buscador en Madrid para encontrar pistas sobre ello. La filial española, que facturó 66 millones de euros en 2015, pagó apenas 8 millones de euros en Impuesto de Sociedades en los últimos ocho ejercicios.
Por su parte, Microsoft, que también cuenta con su centro de operaciones en Dublín, es una de las más ‘castigadas’ por la Hacienda española. Ha pleiteado durante los últimos años con la administración para evitar pagar una factura fiscal de 30 millones de euros. Pero quien se lleva la palma es Oracle, una gran corporación fundada en Estados Unidos a finales de los 70 y uno de los gigantes del software empresarial, que ha sido obligada a pagar 87 millones de euros de tributos impagados tras las actas levantadas por Hacienda.
En los últimos años, las grandes tecnológicas han pagado más de 120 millones de euros por diferentes actas tras investigaciones de la Agencia Tributaria. Ahora está por ver si tomará medidas como pedía la comisaria para hacer pagar más impuestos a las empresas.