En septiembre de 2012, Telefónica cambió las reglas del juego de las telecomunicaciones en España. Bajo el paraguas de ‘Fusión’ incluía por primera vez fijo, móvil y ADSL. Rompía el mercado. Ahora, cuatro años después y a las puertas de Navidad, plantea un importante recorte en los precios en algunos de esos paquetes tras tres subidas consecutivas. ¿Es esta la antesala de una nueva guerra de precios en las telecos? Sus dos grandes competidores, Vodafone y Orange, se muestran a la expectativa de cómo evolucione el mercado. El cuarto operador, Másmóvil, siempre más batallador, descarta por ahora una rebaja agresiva.
Telefónica salía a escena hace unos días para plantear un importante recorte de tarifas. Reduce un 50% las tarifas del paquete más básico de ‘Fusión’ hasta principios de enero y se alargará durante seis meses. El objetivo: sacar toda la artillería para captar clientes en el periodo navideño de cara al nuevo ejercicio fiscal. En los nueve primeros meses de este 2016, la compañía ingresó uno de cada tres euros a través de estos paquetes.
Este recorte para nuevos clientes llega después de que la compañía haya liderado tres subidas de tarifas, que vinieron acompañadas de la inclusión obligatoria de servicios como el fútbol o un incremento en los datos de internet móvil. La consecuencia en sus cuentas: en el último trimestre, el ingreso medio por usuario de ‘Fusión’ creció un 10% respecto al año anterior.
¿Es este nuevo movimiento el primer paso de una nueva guerra de precios como la que tuvo lugar entre 2012 y 2014? Fuentes oficiales de la compañía reconocen que esta campaña navideña entra dentro de lo habitual en la política de la empresa y que llega después de meses sin estas rebajas destacadas. Pese a ello, no cierran la puerta a un escenario a la baja en los próximos meses. “Dependerá de muchas cosas y de cómo vaya el mercado”, apuntan.
¿Qué van a hacer los dos grandes?
Pero el paso ya está dado. Y lo habitual en estos casos es que los siguientes en completarlo sean sus dos más directos competidores. Y estos no cierran la puerta directamente a ningún recorte y se limitan a circunscribir una decisión como esa a las condiciones de mercado.
¿En el lado de Vodafone? Desde la compañía, que en el tercer trimestre de este año ha perdido el segundo puesto en facturación en España tras ser sobrepasada por primera vez por Orange, aseguran que las rebajas que se están llevando a cabo se enmarcan en la actividad propia comercial del periodo pre-navideño, al igual que sucede a las puertas del verano. Fuentes oficiales se limitan a asegurar que irán adaptando sus precios “a lo que ocurra en el mercado”. Este lunes se activó el servicio del gigante proveedor de contenidos online HBO, cuyo portfolio audiovisual será incluido gratuitamente para los clientes con paquetes convergentes más caros.
Orange también apuesta por esa misma estrategia. Al menos de manera oficial. Sin embargo, este lunes la compañía gala decidió presentar su oferta de gama más alta a un precio muy ajustado: 500 megas de fibra simétrica, un paquete de 24 gigas de datos móviles para todas las líneas de la tarifa y todos los contenidos (incluido del fútbol) por 130 euros. Su objetivo, precisamente, es atacar al segmento con poder adquisitivo más alto.
Ambas compañías tienen a sus operadores móviles virtuales (OMV) para poder llevar una rebaja de precios en las tarifas más básicas. Así ha sucedido con Amena, que anunció ayer un nuevo paquete con menos minutos y más datos por 15 euros al mes, y podría ser lo mismo con Jazztel. Ambas marcas están en manos de Orange, que tiene la posibilidad de utilizarlas en ese posible escenario a la baja mientras pueden mantener la parte alta de su oferta.
Másmóvil, el cuarto en liza
Aparte de los tres grandes, el regulador español ha defendido en público la existencia de un cuarto operador que sea el dinamizador del sector y el que despierte la competencia en el resto a través de ofertas más agresivas y con una política de precios más arriesgada. Es lo que ha sucedido, por ejemplo, en un mercado como el mexicano, donde Telefónica ha visto como la entrada de AT&T, tras la compra del tercer y cuarto operador del país, ha iniciado una dura ‘guerra de precios’ para ganar cuota de mercado.
Sin embargo, en el grupo, liderado por Meinrad Spenger y conformado ahora también por Pepephone y Yoigo, no están muy por la labor de llevar a cabo esa tarea de liebre. En plena digestión de las operaciones y con unas tarifas ya muy ajustadas en su oferta convergente, cuya oferta principal la han extendido por segunda vez hasta final de este año, no están dispuestos a exhibir la tijera. Fuentes cercanas al operador aseguran que no se encuentran entre los planes un recorte importante en las tarifas.
Un sector en recuperación
Estos movimientos se producen justo en plena recuperación del sector de las telecomunicaciones. Todos los actores coinciden que el pasado 2015 y, sobre todo, este 2016 han representado los años de la mejora de las cuentas de resultado. Durante los dos ejercicios anteriores, la guerra de precios (y la caída del consumo) redujo de manera significativa el nivel de ingresos.
En 2015, según las cifras de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el sector subió por primera vez desde 2009. Frenó la sangría de años de crisis, tras tocar techo superando la barrera de los 44.000 millones en 2008. En total la facturación se elevó a 30.800 millones de euros, lo que supone una cifra muy similar a la del año anterior. En el primer trimestre de este año, la tendencia se mantiene: un 2,9% de incremento.
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