Se la consideró una de las ganadoras de la crisis. Los españoles comenzaron a mirar cada céntimo y, a la hora de elegir qué producto comprar en el supermercado, prevalecía el precio por encima de la enseña. La marca blanca se coló de lleno en la cesta de la compra y, años después, se ha quedado. Al cierre de 2016, copa el 34,1% del mercado. Y ha vuelto a crecer, un 0,2% respecto a 2015, según el panel de consumo publicado este lunes por Kantar Worldpanel.
De hecho, ese 34,1% es el mejor dato de la marca blanca de los últimos 15 años. En 2002, las enseñas de los distribuidores eran el 19,7% del mercado, según Kantar. Desde entonces no ha hecho más que crecer. El principal alza lo experimentó en 2008, coincidiendo con el inicio de la crisis, cuando pasó del 24,6% al 27% de cuota en sólo 12 meses. Y siguió avanzando hasta suponer el 34% en 2014, hasta entonces su mejor registro. Esos porcentajes no desglosan datos por cadenas de gran consumo, sino el agregado de la marca blanca en el conjunto de operadores de la distribución alimentaria.
Hace un año, el sector consideró que la marca blanca había comenzado a retroceder, sus ventas descendieron sólo una décima, hasta el 33,9%. Entendían que ese cambio era un indicio a favor de la vuelta del consumo hacia la marca del fabricante. Sin embargo, parece que no ha sido así, porque la cuota de mercado de la marca blanca ha vuelto a repuntar en 2016.
Las enseñas de los distribuidores pesan cada vez más en la cesta de la compra y eso no significa, según Kantar Worldpanel, que en la distribución alimentaria haya menos productos. Al cierre de 2016, en el mercado había 147.155 referencias. Es casi el doble de las que existían hace 15 años, cuando en el mercado había 85.481 productos. Kantar no dice cuántas de esas referencias, en 2001, eran de marca blanca. Sí lo dice del año pasado. En 2016, el 49% de la oferta de los ‘súper’ era marca blanca; el otro 51%, del fabricante.
Seis cadenas dominan el mercado
Más de la mitad de las compras que se hacen en las cadenas de supermercados se concentran en seis cadenas. Juntas, Mercadona, Dia, Carrefour, Eroski, Lidl y Alcampo (Auchan) copan el 53,5% de las ventas en valor, según Kantar. Es decir, más de cinco de cada 10 euros de las compras en el sector del gran consumo se concentra en esas compañías.
Y hay una que se lleva el grueso de las ventas. Y que sigue creciendo. Mercadona concentra el 22,9% de las ventas del sector, tras volver a crecer en 2016. Repuntó un 0,2%. La cadena de supermercados valenciana no desvelará cómo le fue el pasado año hasta principios de marzo. Será entonces cuando diga cuántos locales ha abierto y si ese repunte que estima Kantar se debe, sobre todo, a las nuevas aperturas que, en los últimos meses, ha concentrado en las regiones donde tenía menor presencia, como en el norte de España.
Por detrás de la empresa de Juan Roig están Dia y Carrefour. Ambas están estancadas en ventas y cada una representa el 8,5% de las ventas del sector. Ni crecen ni descienden. El cuarto operador también retrocede. Se trata del grupo vasco Eroski que ha recortado sus ventas un 0,3%, según este panel de consumo. Su cuota de mercado se queda así en el 5,8%. Hay que tener en cuenta que Eroski ha dado en los últimos años pasos atrás, como la venta de sus supermercados Caprabo en Madrid, que pasaron a manos de Dia.
Así, las ventas de Carrefour, Dia y Eroski juntas se quedan por detrás de Mercadona. Las tres suman una cuota de mercado conjunta del 22,8%. ¿Alguien más crece?. Sí, Lidl. La cadena de supermercados alemana se ha convertido en el principal revulsivo del sector. Lleva tres años consecutivos creciendo (en 2016 repuntó un 0,5%) hasta concentrar el 4,1% de las ventas. Ese ‘Top 6’ de enseñas de súper e hipermercados lo completa Alcampo (Auchan) que es el 3,7% del sector, una décima menos que un año antes.