Está en el grupo de gigantes tecnológicos que no ha tenido que saldar cuentas con Hacienda, pese a las repetidas inspecciones. El grupo en España no ha sufrido, al menos en los últimos años, ninguna sanción de la Agencia Tributaria. Durante el ejercicio 2015, cuyas cuentas están recién presentadas en el Registro Mercantil, ha vuelto a suceder: no cuenta con ninguna sanción de las autoridades fiscales, pese a tener abiertos a inspección los principales impuestos de los últimos cuatro años.
El ‘holding’ en España, que da cobijo a seis filiales y que depende de manera directa de la matriz en Estados Unidos, cerró el ejercicio con unos ingresos de más de 1.500 millones de euros, un beneficio antes de impuestos de 75,6 millones y una plantilla de algo más de 8.000 empleados.
Su estructura fiscal
IBM es una de las tecnológicas históricas. La compañía está centrada no sólo en la fabricación de ‘software’ y ‘hardware’ para ordenadores sino, sobre todo, en servicios de alojamiento en internet o consultoría. La empresa cuenta en España con una estructura basada en un hólding cuya sociedad matriz es International Business Machines, S.A. Esa compañía depende directamente de la matriz estadounidense IBM World Trade Corp.
Con esa y otras compañías de todo el grupo, el ‘holding’ español lleva a cabo compra de productos terminados (como otras compañías como Apple), el pago de ‘royalties’ y hace las veces de comisionista. ¿Qué la diferencia, por tanto, de otras tecnológicas? Que su sede principal no está en Irlanda, Países Bajos o Luxemburgo, sino en Estados Unidos.
Bajo el paraguas se encuentran firmas como IBM Global Services, IBM International Services Center e IBM Global Services Redes de Ordenadores y Servicios. A estas tres se suman las compañías que el grupo ha conformado junto con compañías como Caixabank, Banco Mare Nostrum o Catalana Occidente.
Más inspecciones
Con esa estructura, no ha escapado de la lupa de Hacienda. La Agencia Tributaria ha ido abriendo a inspección, de manera sistemática, todos los impuestos más destacados a los que está sujeta el grupo. En concreto, en el ejercicio 2015, cuyas cuentas han sido presentadas este mes de febrero, tenía abiertos los años comprendidos entre 2011 y 2015.
En febrero de 2016, la empresa recibió la comunicación de la Agencia Tributaria de la apertura de una nueva inspección en relación con el Impuesto sobre Sociedades del ejercicio 2014. ¿El resultado? No concluyó antes de la aprobación de sus cuentas.
Las cifras de negocio de la empresa
El grupo tuvo en España unos ingresos de 1.510 millones de euros, lo que representa apenas un 1,3% más de los 1.490 millones de un año antes. Con esas cifras, el holding apenas suma unos beneficios netos de 75,7 millones (el año anterior incurrió en unas pérdidas de 161 millones).
La compañía cerró el ejercicio con una plantilla de algo más de 8.000 trabajadores. Supone un coste de 572 millones de euros. La compañía llegó a un acuerdo en febrero de 2016 con los sindicatos para frenar un despido colectivo, aliviar la reducción salarial del 10% al 7,5% para todo el equipo.