Cásar Alierta, expresidente de Telefónica, tiene un plan de pensiones por el valor de 54,2 millones de euros y una retribución añadida "especial" de medio millón de euros por su actividad como miembro del consejo de administración, según reza en el informe de retribuciones a sus directivos presentado por la compañía en la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMV).
Esa retribución fija "especial" es en base a su papel como consejero de Telefónica. "En atención a su compromiso de contribuir de forma especial, desde su cargo de consejero al desarrollo de las relaciones institucionales del grupo", asegura la compañía. Esos 500.000 euros son adicionales a lo que le corresponde como vocal del consejo y miembro de cualquiera de las comisiones.
¿Cómo llega a esta pensión?
Alierta contaba en su momento con un blindaje que en 2014 decidió sustituir dentro de un cambio de estrategia de la 'teleco'. A cambio, la empresa llevaba a cabo una aportación extraordinaria a su plan de pensiones de 35,5 millones de euros, lo que representaba un importe igual a la suma de todas las obligaciones contractuales que mantenía en aquel momento con su presidente.
Esos 35,5 millones de euros se sumaron a lo que ya tenía consolidado en ese plan de pensiones. Según ha desvelado la empresa, en 2015 la cifra total de ese plan de pensiones alcanzó los 52,3 millones de euros. Un año después, esos fondos han alcanzado los 54,2 millones de euros. Es decir, ha engordado en 1,9 millones. ¿La razón? Según esgrimen fuentes oficiales de la empresa, se trata de una revalorización natural, pues desde Telefónica no ha habido ninguna aportación extraordinaria en el último ejercicio.
Se trata de una de las cifras más altas de un plan de pensiones para un directivo en España. Como ejemplo más reciente está Ángel Ron, ya expresidente del Banco Popular, que se aseguró el derecho a cobro de un plan de pensiones de 23 millones en medio de una fuerte polémica por su gestión.
Otras retribuciones
Más allá del medio millón de euros que César Alierta se ha asegurado como retribución 'especial', el año 2016 se saldó con 1,1 millones de euros en el año 2016. ¿De dónde proceden? Se trata de 607.000 euros de su sueldo y otros 539.000 euros de remuneración fija.
Pese a lo abultado, hay una importante diferencia respecto a lo cobrado en el año 2015, cuando ejerció como presidente durante todo el año. Alcanzó los 6,5 millones de euros. Es una cantidad muy superior a lo que ha percibido su sucesor, José María Álvarez-Pallete, que se embolsó 5,3 millones de euros. De esta cantidad, 1,92 millones procedieron de su sueldo y un total de 3,4 millones a través del 'bonus' por objetivos.
La razón de esta diferencia se encuentra en que Álvarez-Pallete ha renunciado a su sueldo de presidente por el de consejero delegado. Es decir, se trata de casi un 14% de diferencia. También ha renunciado también al cobro de su remuneración fija como presidente del consejo de administración (240.000 euros) y como presidente de la comisión delegada (80.000 euros).
El resto de consejeros y directivos
Telefónica informa que la retribución total percibida por los miembros del consejo de administración en el ejercicio 2016, en su condición de tales, fue de 3,7 millones de euros por asignación fija y dietas, en línea con la del año anterior.
Por su parte, los directivos que en el ejercicio 2016 integraban la alta dirección de la compañía, excluidos los que forman parte integrante del Consejo de Administración, han percibido remuneraciones durante el ejercicio 2016 por importe total de 9,8 millones de euros, frente a los 10 millones de euros de 2015.
Todo ello, en un año,el 2016, en el que la empresa logró cerró 2016 con unos ingresos netos de algo más de 52.000 millones de euros, una inversión de más de 8.900 millones y unos beneficios netos de 2.369 millones. Unos resultados que han sido presentados tras una reformulación de las cifras de 2015, que generó confusión al hacer complicada su comparación.