El sector eléctrico ha vivido un terremoto en el inicio de 2017. Las malas condiciones climáticas (la ausencia de viento y de lluvia) impidieron tirar de energía eólica e hidráulica, lo que obligó a producir luz con centrales de ciclo combinado, mucho más caras porque funcionan con gas y el coste de esta materia prima estaba disparado. El precio de la luz volvió a abrir ‘telediarios’ y el ministro de Energía, Álvaro Nadal, tuvo que dar explicaciones en el Congreso de los Diputados.

Ahora, a finales de febrero, la situación parece calmada. ¿Pero volverán a dispararse los precios en lo que queda de año? ¿Y en el invierno de 2018? ¿Y en 2019? A tenor de lo que ha desvelado esta semana Iberdrola a los inversores esa situación puede volver a producirse pero, aún así, el coste de la luz en el mercado mayorista va permanecer estable y se mantendrá a niveles muy similares a los del año 2015.

La compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán presentó esta semana en Londres sus resultados de 2016 y la actualización de sus previsiones para los próximos años. Allí desgranó a los analistas cómo le ha ido en los últimos meses y cómo le irá hasta 2020. Y, en esa presentación, detalló las condiciones de los países en los que opera y sus estimaciones para el mercado mayorista eléctrico.

¿Qué va a pasar según la eléctrica vasca? Que el precio de la luz en España va a mantenerse estable en el entorno de los 48 euros por megavatio/hora (MWh) durante los próximos tres ejercicios, según explicó a los inversores el director general de negocios de Iberdrola, Francisco Martínez Córcoles. Lo hará en un contexto sin grandes incrementos de la demanda eléctrica (prevé un repunte anual del 1,2%) y con creciente competencia, argumentó

Este contexto estable, sin embargo, no evitará que “por las condiciones hídricas o de viento” o por “picos de demanda” puedan producirse “desviaciones temporales”, matizó Martínez Córcoles a los inversores. “Enero es un ejemplo perfecto”, añadió. Es decir, volverá a haber picos pero, en el cómputo anual, los precios se van a mantener estables, según la eléctrica.

Esos 48 euros por MWh contrastan con los picos que se alcanzaron este enero. En concreto, es la mitad del precio de la luz mayorista que se alcanzó en las primeras semanas de año. Entonces, llegó a superar los 102 euros/MWh influida, también, por la situación en Francia que tuvo que tirar de luz española al tener cerradas, por revisión, varias centrales nucleares.

Hay que tener en cuenta que el precio de la luz en el mercado mayorista no es lo mismo que la factura final que pagan los consumidores. Ese coste sólo representa entre el 35% y el 40% del recibo eléctrico, en función de si se tiene una tarifa regulada (que fija el Gobierno) o de libre mercado (en la que cliente y eléctrica fijan por contrato un precio para todo el año). Otro 25% de la factura son impuestos y el 40% restante son peajes. Bajo este término se incluyen conceptos varios que no tienen nada que ver con el coste de la luz en el mercado, desde las primas a las renovables, a las compensaciones a los sistemas no peninsulares para que la luz no cueste más en Canarias y Baleares; o el pago para que las grandes empresas dejen de tirar del sistema eléctrico en picos de consumo y evitar que se caiga el sistema.

¿Cómo está ahora el precio de la luz?

Las previsiones de Iberdrola son, incluso, más optimistas que la realidad actual del sector eléctrico. Este fin de semana, el precio de la luz se situará de media en los 50,11 euros/MWh, según las previsiones publicadas este viernes por el OMIE (acrónimo del Mercado Ibérico de la Energía), aunque hay picos diarios puntuales por encima de los 58 euros y descensos, durante la madrugada, en los que la luz roza los 41 euros/MWh.

Otra de las grandes eléctricas, Endesa, también ha comunicado esta semana al mercado sus previsiones en cuanto al precio de la luz, pero en este caso sus estimaciones son a más corto plazo, sólo para el ejercicio 2017. La eléctrica presidida por Borja Prado cree que el coste de la luz en ese mercado mayorista se mantendrá en el entorno de los 50 euros/MWh. Ese precio estará en niveles similares a los de 2015 y por encima de los 40 euros/MWh que se pagaron de media a lo largo de 2016. El precio en ese ‘pool’ fue un 21% menor, simplemente, porque llovió más e hizo más viento que en un ejercicio ‘normal’.

Los costes fluctúan en el mercado mayorista porque funciona como una especie de cesta. En ella, primero entran las centrales más baratas a la hora de producir luz (las hidráulicas, las eólicas, después las nucleares) y, las últimas, son las más caras: las de ciclo combinado. Pero son estas las que fijan el precio final del ‘pool’. Se trata de un precio marginalista. Así, si el precio está en 102 euros/MWh, ese coste se paga igual a las eléctricas produzcan con gas o con viento. Visto el vaivén del inicio de año, habrá que esperar a los resultados del primer trimestre, que se conocerán en primavera, para saber si se cumplen o no las previsiones de precios que han marcado las eléctricas.