Las posiciones bajistas en Popular aumentan hasta el máximo histórico del 12,19%
Las posiciones cortas en Banco Popular alcanzaron un 12,19% del capital total de la entidad a fecha del pasado viernes, 14 de abril, de forma que se sitúan en máximos desde que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) inició los registros y se alejan del dato anterior, que ascendía al 10,6%.
17 abril, 2017 16:27Las entidades que más han incrementado sus posiciones desde entonces han sido Marshall Wace LLP, Samlyn Capital LLC, Oceanwood Capital Management LLP y Oxford Asset Management.
En concreto, Marshall Wace LLP tenía declaradas posiciones bajistas el pasado martes sobre el 2,39% del capital, frente al 2,28% anterior, mientras que Samlyn Capital LLC declaró el 10 de abril posiciones cortas por el 1,42% del capital, frente al 1,3% precedente.
Oceanwood Capital Management LLP tenía el pasado 12 de abril posiciones cortas declaradas sobre el 0,85% del capital del banco, al tiempo que las de Oxford Asset Management se situaron en el 0,6%, frente al 0,5% anterior.
Por su parte, AQR Capital Management declaró el 13 de abril posiciones cortas por el 1,36% del capital, de forma que las reduce desde el 1,94% anterior.
BlackRock Investment Management declaró posiciones cortas sobre el 0,6% el pasado 9 de febrero, un porcentaje que no ha variado a día de hoy, al igual que se han mantenido estables las posiciones bajistas de PDT Partners LLC y de Lansdowne Partners (UK) LLP en el 0,51% y el 0,7%, respectivamente.
Desde el año 2010, la CNMV exige que se le comunique toda posición corta sobre cualquier cotizada española que exceda al 0,2% del capital social y hace públicas las que superen el 0,5% del capital.
La toma de posiciones cortas es una operativa bursátil que utilizan los inversores cuando prevén que el mercado va a bajar o está sujeto a mucha volatilidad.
En líneas generales, consiste en pedir prestadas acciones de una entidad a cambio de un alquiler con la intención de venderlas y posteriormente recomprarlas más baratas. El precio obtenido por la venta de los títulos compensaría con creces el alquiler y la posterior compra.