70.000 euros de ingresos y unas pérdidas de 3,6 millones, el doble que un año antes. Es el balance del pasado año en EyeOS, la ‘aventura’ empresarial del que fuera una de las caras más visibles del emprendimiento español, Pau García-Milá. La compañía cerró un ejercicio, en el que Telefónica, su dueña, anunció su ‘desconexión’, que fue para olvidar. Hoy se encuentra en causa de disolución y la ‘teleco’ aún no ha aprobado una ampliación de capital que asegure su viabilidad como sociedad.
Fue en 2014 cuando Telefónica compró la compañía. Lo hacía después de que García-Milá y su equipo no pudieran cerrar una ronda de financiación con la que salvar a la empresa. Telefónica la adquirió, sin que se hiciera pública la cantidad que pagó, aunque según ha podido saber este medio, fue ‘simbólica’.
Una caída de negocio sin freno
La caída en el negocio ha sido continua en los tres últimos años. En ese 2014, primero que cerró bajo el paraguas de Telefónica, tuvo unos ingresos de 277.000 euros. El pasado año, la facturación fue de apenas 70.000 euros. Es decir, en los últimos tres ejercicios ha reducido a una cuarta parte su volumen de negocio. ¿De dónde procedieron? De la venta de su solución para construir un escritorio virtual a través de la web para ordenadores.
En esa evolución, lo que más se ha resentido ha sido la rentabilidad. Si en 2015 ya marcó unas pérdidas récord de 1,8 millones de euros (300.000 euros más que un año antes), el pasado ejercicio los números rojos ascendieron a 3,6 millones, según ese balance.
Con estas cifras sobre la mesa, la sociedad se encuentra en causa de disolución, al contar con un patrimonio neto y un fondo de maniobra negativos. “La normativa obliga a que se convoque Junta General en dos meses para que se adopte el acuerdo de disolver la sociedad, a no ser que se incremente o reduzca el capital social en esa medida”, asegura el auditor en su informe.
¿Una ampliación de capital para salvarla?
Eso es justo lo que ocurrió a finales del año 2015. En diciembre, Telefónica inyectó 2,6 millones de euros de capital con el objetivo de ‘rescatar’ y equilibrar las cuentas de la sociedad. En esta ocasión, una operación similar está pendiente de aprobarse.
Pese a ello, en la memoria de la compañía la posición de Telefónica queda meridianamente clara: “El Socio único ha manifestado su apoyo financiero al consejo para garantizar la continuidad de las operaciones de la misma”. En este sentido, plantea tres salidas: el otorgamiento de garantías para la concesión bancaria necesaria para el desarrollo de la actividad; la concesión de esta financiación vía préstamo o ampliación de capital o la búsqueda de soluciones “para definir la fórmula óptima para asegurar la continuidad”.
¿Qué va a hacer Telefónica?
Esta posición planteada en la memoria contrasta con la que hace pública la ‘teleco’. Ya en diciembre aseguraba que la ‘desconectaba’: eliminaba su servicio en la nube del portfolio de Telefónica y repartía su equipo en diversos proyectos relacionados con esta área.
Es la misma posición que hace pública ahora. Un portavoz oficial de la empresa asegura a EL ESPAÑOL que es una empresa “sin actividad” y que ha sido “desconectada”. No se aclara si va a haber una ampliación de capital o se disolverá de manera definitiva la sociedad, creada en el año 2006 bajo el nombre ‘Digital Bubble SL’ (y que cambió en 2011 por EyeOS SL). “No sé lo que va a pasar a nivel jurídico”, reconoció en diciembre el responsable de Innovación de la ‘teleco’, Gonzalo Martín-Villa.
En esta situación de cierta ‘interinidad’, los gastos de personal no sólo se han estancado sino que han crecido. Pese a que el número medio de personas empleadas pasaron de 26 a 21, los desembolsos en salarios han pasado de 1,34 a 1,73 millones de euros.
Su dueño, Telefónica Digital
Con todo, es una incógnita cómo se valoraba sobre el papel a la compañía a cierre de ese ejercicio. Sólo hay una referencia: el valor que le otorgaba su dueño en 2015. La filial Telefónica Digital SLU, propietaria del 100% de las acciones de EyeOS, plasmaba en su memoria que sobre el papel la empresa fundada por Pau García Milá tenía un valor contable de 2,5 millones de euros.
Bajo este paraguas convive aún con otras adquisiciones o proyectos del área digital de la ‘teleco’ como Saluspot, cuyo 49% fue adquirido en 2014; Yaap Digital, la ‘aventura’ de pagos móviles que inició de la mano de Caixabank y Santander y que hoy está en fase de liquidación, o la consultora española Synergic Parnters.