Las acciones de la firma se han llegado a depreciar un 40%, hasta los 12 céntimos por título, durante las primeras horas de la sesión bursátil respecto al cierre de ayer, cuando acabó a 27 céntimos.
La llamada "vieja" Pescanova arrancó el día con un ligero repunte, hasta los 29 céntimos, tras lo que volvió a devaluarse con fuerza.
Actualmente, la empresa es una sociedad de cartera sin actividad productiva cuyo principal activo es una participación del 1,7 % en Nueva Pescanova.
La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) le permitió volver a cotizar desde ayer después de mantener suspendida la acción durante más de cuatro años, desde que en 2013 la firma entró en concurso de acreedores.
El proceso de reestructuración se aprobó dos años más tarde, cuando el grupo Pescanova se dividió en dos: la parte productiva quedó en manos de la banca acreedora, agrupada en lo que hoy es Nueva Pescanova; mientras que la "Vieja" quedó como una sociedad de cartera cuyo principal activo era un 20 % de las acciones de la firma "hermana".
La reciente ampliación de capital aprobada por Nueva Pescanova ha supuesto la dilución del porcentaje de acciones en manos de la "Vieja", que se ha reducido al 1,7 %.