Air France-KLM tiene luz verde para lanzar su ‘low cost’. Después de meses de negociaciones, el sindicato de pilotos de Air France ha dado esta semana su apoyo al plan propuesto por la dirección para lanzar el próximo otoño una aerolínea de bajo coste que le permita competir con los rivales del Golfo Pérsico. El foco está puesto en Asia, aunque no se descarta América Latina.
La nueva aerolínea, apodada por el momento ‘Boost’, empezaría a operar vuelos de media distancia a partir del próximo otoño, en línea con los planes iniciales, y en larga distancia desde verano de 2018. En principio, empezará a operar con una flota de seis Airbus A321, que ampliará a once el próximo verano. Para el largo radio espera contar con varios aviones A340.
El respaldo de los pilotos, necesario para sacar adelante el plan, llega una semana después de que la tripulación de cabina firmara también el acuerdo. El 78% de los pilotos adheridos al sindicato SNPL votaron a favor del plan. “El acuerdo, que podemos considerar sin duda histórico, muestra que podemos encontrar compromiso en esta empresa”, señaló el director de Recursos Humanos de la aerolínea, Gilles Gateau, recoge Bloomberg.
El texto aprobado, fruto de seis meses de discusiones, realiza concesiones hacia los pilotos como que la nueva aerolínea tendrá una flota limitada a 18 aviones de recorrido medio y diez de largo alcance. También establece un contrato único para los pilotos, que podrán trabajar indistintamente para Air France o para la nueva aerolínea con, en contra de los planes iniciales, la misma remuneración. A cambio debe lograrse una mejora en la competitividad -con un ahorro de 1,5% para los 3.600 pilotos de la plantilla-.
Además, si la compañía incumple el reparto de actividad entre Air France y KLM al que se ha comprometido, deberá compensar a los pilotos. El objetivo es que la operación de Air France y Boost represente, como mínimo, un 58,5% de las horas de vuelo en el ejercicio 2017-2018 y que aumente hasta un 61% en 2025-2026. Si la aerolínea holandesa supera su cuota, la empresa abonará un suplemento a los pilotos en función del diferencial.
Esta evolución “se apoya en el sólido crecimiento de Air France, solo posible si se apoya en la mejora de la competitividad”, señaló Gauteau. Según el ejecutivo, el acuerdo permitirá a la compañía impulsar la contratación de pilotos por primera vez desde 2012 e incluye un compromiso por parte de los empleados de lograr una mejora de la competitividad de 40 millones de euros al año a partir de 2020.
Los pilotos también han cedido terreno. Han aceptado un día menos de descaso al mes para aquellos que realicen vuelos de menos de cuatro horas y se realizarán cambios en la configuración de las tripulaciones.
"Este acuerdo es el resultado de unas largas negociaciones, que han dado lugar a un compromiso equilibrado en favor de los intereses de la compañía y de sus empleados. Este hito es parte del plan de crecimiento y recuperación 'Trust Together', guiado en particular por el proyecto de una nueva aerolínea", afirmó en un comunicado el presidente y CEO de Air France-KLM, Jean-Marc Janaillac.
Plan estratégico del grupo
Janaillac tiene el mandato de reforzar los márgenes después de años de pérdidas tras años de malas relaciones con los sindicatos, situación que atormentó a su predecesor Alexandre de Juniac. Air France-KLM es uno de los principales operadores europeos que, junto con Lufthansa y la matriz de Iberia, IAG, están tratando de apuntalar su negocio con la creación de aerolíneas de bajo coste para operar en largo radio. A Eurowings, de la alemana, IAG sumó Level a principios del pasado mes de junio.
Cuando el grupo presentó el plan estratégico ‘Trust Together’ a finales de 2016, Janaillac, aseguró que era su manera de “recuperar la ofensiva con un proyecto ambicioso y realista”. Su meta: captar cuota en la creciente industria de transporte aéreo al tiempo que se mejora la competitividad.
La intención del grupo es que la nueva aerolínea tenga una oferta "sencilla, moderna e innovadora" y que, pese a sus precios, ofrezca a los clientes destinos de ocio y de negocios con estándares comparables a los de Air France.
Las nuevas rutas deben todavía definirse, aunque la aerolínea ha señalado ya que se enfocarán en mercados "ultracompetitivos" con la meta de abrir nuevas rutas, reabrir otras que se han cerrado por falta de rentabilidad y mantener aquellas que se ven amenazadas. Air France responde así a la amenaza de las principales aerolíneas del Golfo que con sus modelos de bajo coste están comiéndole la tostada en mercados donde pretende crecer.