Varias partes presentes en el juicio, que se celebra desde el pasado 13 de julio en el juzgado de lo mercantil número 2 de Sevilla, han explicado a Efe que las divergencias se han producido por cuestiones relativas a los avales, las mayorías y los proveedores de la compañía de ingeniería y energía.
El juicio, en el que están presentes 19 abogados en representación de las nueve partes que han impugnado el acuerdo, se empezó a celebrar en el edificio judicial Noga de Sevilla y continuará, al menos, durante toda esta semana en una sala de la Audiencia de Sevilla, con sesiones de ocho horas diarias como máximo.
Los impugnantes ya alegaron el "sacrificio desproporcionado" que han asumido desde que la compañía de ingeniería y energía presentó el concurso de acreedores, con una quita del 97% de la deuda.
Las partes que han impugnado el acuerdo representan reclamaciones que suman más de mil millones de euros, aunque podría plantearse un problema con la deuda completa de Abengoa, que ascendía a 9.000 millones de euros, han precisado fuentes judiciales.
El acuerdo de homologación ha sido impugnado por nueve partes entre entidades financieras, aseguradoras y bonistas.
La vista oral se celebra después de que a principios de enero pasado, el juzgado admitiera a trámite nueve demandas de impugnación presentadas por acreedores del grupo de ingeniería y energía.
Previamente, el 8 de noviembre de 2016 el juzgado mercantil 2 de Sevilla dictó un auto en el que declaraba la homologación judicial del acuerdo de refinanciación.
Tras esa homologación, el acuerdo se extendió a todos los acreedores, lo que llevó a varios de ellos a impugnarlo.
La vista oral, tras el trámite de admisión de pruebas, continuará mañana con las declaraciones de las partes, y el lunes de la próxima semana seguirá con la intervención de los peritos.
Está previsto que mañana se tome declaración a los testigos y que el próximo viernes se expongan las conclusiones, tras lo cual el juez deberá dictar sentencia, lo que podría ocurrir antes de las vacaciones de verano, según las mismas fuentes.
El pasado 31 de marzo, Abengoa completó el proceso de reestructuración de su deuda una vez admitidas a negociación las nuevas acciones y los "warrants" (derechos de compra sobre títulos) emitidos para compensar a los acreedores.
El comienzo de la cotización de los nuevos título diluyó la participación de los antiguos accionistas del grupo, que se quedaron tan solo con el 5 % del capital.