Iberia ha comunicado a los sindicatos su intención de iniciar un nuevo Expediente de Regulación de Empleo (ERE) voluntario, que podría afectar hasta un máximo de 960 trabajadores, frente a los cerca de 1.000 empleados cifrados inicialmente, como paso previo a abrir la negociación.
La aerolínea, que no ha desglosado la afectación por colectivos -personal de tierra, tripulantes de cabina (TCP) y pilotos-, ya había anunciado su intención hace un año de aplicar un tercer ERE de carácter voluntario, como los dos anteriores.
Será el tercer ERE voluntario que aplicará la compañía española, tras su plan de reestructuración que comenzó en 2013 y continuó en 2016. Los dos ERE anteriores afectaron a un total de 5.000 trabajadores.
Plazo de siete días para perfilar las negociaciones
Los sindicatos tienen un plazo de siete días para decidir si encaran la negociación a través de las secciones sindicales o a través de representantes unitarios, antes de que se designe y constituya la comisión negociadora.
Este plazo servirá para designar y constituir la mesa negociadora, que contará con un número máximo de 13 miembros, según ha informado el sindicato independiente de TCP, Sitcpla, en un comunicado.
Afectará fundamentalmente a servicios centrales
Hace un año, el presidente de Iberia, Luis Gallego, explicó que el nuevo ERE voluntario, el tercero que aplica la aerolínea desde la creación de IAG, afectaría a todas las áreas, pero fundamentalmente a los servicios centrales, así como al área de mantenimiento de aeronaves.
Iberia suma unos 17.000 trabajadores en plantilla, donde el personal de tierra sigue siendo el más elevado, tras los ajustes acometidos en tripulaciones, donde no hay prácticamente excedentes, y donde se han abierto incluso procesos de contratación.