En concreto, la energética española ha participado, a través de su fondo de capital riesgo corporativo Perseo, en la ronda de inversión de 6 millones de dólares (unos 5,1 millones de euros) lanzada por Innowatts.

Iberdrola ha cubierto esta financiación junto a Shell Technology Ventures, el fondo de capital riesgo de Royal Dutch Shell, y al fondo de capital riesgo japonés Energy and Environment Investment.

Esta ronda de financiación proporciona a Innowatts, compañía con sede en Houston que inició sus operaciones comerciales en 2014, el capital necesario para ampliar el alcance de su plataforma de análisis, así como para comercializar y extender las capacidades de su solución digital 'e-Utility'.

La plataforma de la startup permite el análisis de los datos de más de 12 millones de consumidores en el mercado regulado y libre proporcionando información que facilita a los proveedores energéticos y a los consumidores optimizar los costes y desarrollar productos y servicios personalizados.

El responsable del programa de capital riesgo de Iberdrola, Diego Díaz, afirmó que la energética se encuentra "entusiasmada" por formar parte del futuro de Innowatts y destacó que en los últimos años el grupo ha invertido "fuertemente" en tecnología e innovación "como pilares" de la estrategia de digitalización de la compañía para 2020.

APUESTA POR I+D+i

En 2016, la multinacional energética invirtió 211 millones de euros en I+D+i, lo que supone un incremento del 5,5% respecto al ejercicio anterior. Durante los últimos ocho años, la compañía ha más que duplicado los recursos destinados a esta área.

La apuesta por la I+D+i se recoge en el Plan de Innovación 2015-2017 del grupo presidido por Ignacio Sánchez Galán, en el que se establece que la innovación es la principal herramienta de Iberdrola para garantizar la sostenibilidad, la eficiencia y la competitividad de la empresa con arreglo a tres ejes fundamentales: optimización continua de las operaciones, nuevos productos y servicios y tecnologías y modelos de negocio disruptivos que permitan afrontar los retos energéticos del futuro.

El fondo de capital riesgo corporativo Perseo, creado en 2008, había invertido hasta el año pasado más de 50 millones de euros en tecnologías y nuevos negocios en el sector energético mundial.

Entre sus principales inversiones a nivel internacional destacan la realizada en la compañía Stem, ubicada en Silicon Valley y que ofrece ahorros a sus clientes comerciales e industriales mediante soluciones de almacenamiento energético que combinan técnicas de análisis predictivo, 'cloud computing' y 'big data' junto con baterías.

A escala nacional, una de las principales apuestas de Iberdrola a través del fondo de capital riesgo corporativo ha sido Arbórea Intellbird, empresa salmantina que comercializa la inspección con drones para infraestructuras energéticas.