El consorcio del que forma parte el grupo que actualmente controla Carlos Slim se hizo en junio de 2013 con este proyecto, presupuestado entonces en 700 millones de euros y considerado como una de las mayores obras de ingeniería civil del momento.
El puente se ha puesto en servicio, con su apertura al tráfico, este fin de semana, concluyendo así fin tres años y medio de construcción.
La infraestructura, tendida sobre el río Mersey, cuenta con 2,248 kilómetros de longitud, conformada por un tramo central de un kilómetro y dos viaductos.
El puente forma parte de una nueva autopista promovida por el Ayuntamiento de Halton para conectar las ciudades de Runcord y Widnes, en las proximidades de Liverpool.
Asimismo, alberga seis carriles de peaje y con su construcción se pretende aliviar la congestión que presenta el puente Silver Jubilee, hasta ahora único paso sobre el río. Además, busca conectar esta zona con la red principal de autopistas del Noroeste de Inglaterra.
4.600 PUESTOS DE TRABAJO.
La construcción de esta infraestructura ha generado un total 4.600 puestos de trabajo, entre directos e indirectos, en todo su proceso de ejecución, según el grupo.
El consorcio a través del que FCC ha construido y entregado esta obra se completa con la británica Kier y la coreana Samsung. Con su participación en este proyecto, la compañía además de potenciar su presencia en el mercado británico, amplía su experiencia en construcción de puentes.