En un informe sobre Telefónica, Citi señala que las preocupaciones en torno al endeudamiento de la compañía han comenzado a "aliviarse" tras la "consistente reducción" de la deuda registrada en los últimos trimestres, ayudada en parte por la ausencia de subastas de espectro.

En este sentido, añade que esto no quiere decir que el balance del grupo tenga "flexibilidad", pero destaca que el flujo de caja está mejorando pese a estar en niveles ya relativamente elevados, al mismo tiempo que la venta de Telxius proporcionará un nuevo alivio a la deuda en el cuarto trimestre de 2017.

Los analistas de la entidad prevén que la reducción de la deuda neta siga descendiendo en los próximos trimestres y que, en un escenario conservador, la ratio caiga hasta las 2,5 veces en 2018, frente a las 2,7 veces del tercer trimestre de 2017 y el máximo de 3,2 veces del segundo trimestre de 2016.

A este respecto, consideran que con el tiempo la compañía podrá comenzar a destinar parte del flujo de caja generado a los dividendos, lo que respaldaría la evolución de la cotización de las acciones de Telefónica.

COMPETENCIA EN ESPAÑA

Respecto a su negocio en España, Citi remarca que desde principios de año se han registrado presiones en el resultado bruto de explotación (Oibda) de la filial, así como que existe preocupación por el impacto que puede tener en el mercado español el crecimiento de MásMóvil, pero cree que la perspectiva es "razonable".

A este respecto, asegura que los resultados del tercer trimestre han sido "tranquilizadores" y destaca que las promociones introducidas este año han tenido éxito a la hora de mejorar el impulso comercial del negocio de consumo español.

Citi cree que el mercado esta preocupado "con razón" por la intensa competencia en el mercado convergente 'low cost' en España, lo que, en el mejor de los casos, podría reducir el ritmo reciente de subidas de tarifas y, en el peor, generar nuevas promociones.

Sin embargo, no cree que este escenario sea "sostenible" en el medio plazo, ya que MásMóvil no cuenta con activos para tener un efecto disruptivo en el mercado y los costes mayoristas que tiene no le permitirán mantener su actual ritmo de ofertas.

De hecho, los analistas de la entidad esperan que en algún momento, una vez que logre un cierto tamaño en el negocio de la banda ancha y antes de que comience el desamantelamiento de la red de cobre, MásMóvil empiece a subir los precios de sus productos de banda ancha y convergentes.

Asimismo, añaden que, tras dos años de perder cuota de mercado y clientes en televisión de pago, el negocio de Telefónica está volviendo a registrar un "fuerte impulso", en parte por su nueva cartera de productos. Citi remarca que Telefónica ha reconocido que la funcionalidad de sus dispositivos y el contenido de series son características importantes que no cuestan tanto como el fútbol.

Por otro lado, ha remarcado que Telefónica ha sufrido en los últimos años la pérdida de ingresos mayoristas a medida que sus competidores han ido construyendo sus propias redes y, en especial, destaca el caso de la pérdida del contrato con Yoigo en favor de Orange, lo que le restará unos 130 millones de euros a los ingresos en 2018.

Pese a ello, añade que esta pérdida de contratos mayoristas se está reduciendo, ya que Vodafone y Orange ya han completado la mayor parte de su migración a su propia red, y la compañía se beneficiará del uso de la red de Telefónica por parte de sus competidores en el paso del cobre a la fibra, lo que genera un ingreso medio por usuario (ARPU) mucho mayor.