En concreto, la compañía ha llevado a cabo una revisión estratégica de Enstor Gas Storage, incluido el negocio comercial, y ha acordado que seguirá adelante con un plan para su venta, informó Avangrid a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC por sus siglas en inglés).
La posible venta de este negocio por el grupo energético estaba sobre la mesa desde hace meses. De hecho, en febrero, en la presentación de resultados del ejercicio 2016, el consejero delegado de Avangrid, Jim Torgerson, ya señaló que este activo "no era esencial", por lo que la compañía estaba analizando "opciones estratégicas" al respecto.
También el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, abrió el pasado mes de noviembre, en la presentación de resultados del tercer trimestre del año, la puerta a la venta de algunos activos no estratégicos, aunque sin precisar ninguno en concreto, para dotar provisiones.
En 2010, Iberdrola ya procedió a desinvirtir en sus activos de gas en Estados Unidos, con la venta de tres filiales por unos 1.250 millones de dólares (unos 1.045 millones de euros) a UIL Holdings Corporation, compañía de cuya fusión con Iberdrola USA surgiría en 2015 Avangrid.
La energética se deshizo entonces de las distribuidoras Connecticut Natural Gas Corporation (CNG), The Southern Connecticut Gas Company (SCG) y The Berkshire Gas Company (BGC).
Enstor opera un total de cuatro instalaciones de almacenamiento de gas: Caledonia (Condados de Lowndes y Monroe, Mississippi), Freebird Gas Storage (Condado de Lamar, Alabama), Grama Ridge Gas Storage (Condado de Lea, Nuevo México) y Katy Storage Hub (condados de Fort Bend y Waller, Texas). Además, la compañía está desarrollando el proyecto Waha Storage Hub, en el Oeste de Texas.
UN IMPACTO POSITIVO DE 1.200 MILLONES POR LA REFORMA FISCAL
Por otra parte, Iberdrola anunció este jueves que la aprobación de la nueva reforma fiscal en Estados Unidos dará lugar a un impacto positivo de unos ingresos no recurrentes de unos 1.200 millones de euros después de impuestos en sus cuentas de este ejercicio 2017.
La energética, que subrayó que estos cálculos son preliminares, indicó que estos 1.200 millones de euros después de impuestos son resultado de los ajustes a realizar en diversas partidas contables "que se están analizando, al no estar disponible aún toda la información necesaria para su determinación".
No obstante, la compañía afirmó que no espera que este ingreso recurrente altere "significativamente" su beneficio neto consolidado para 2017, ya que su impacto será compensado mediante la aplicación de diversas medidas de gestión relacionadas con la optimización del perfil de negocio del grupo, que incidirán en la mejora de los resultados consolidados en los próximos ejercicios.
A este respecto, indicó que entre las medidas de gestión susceptibles de aplicación destacan posibles correcciones en los valores contables como consecuencia de la salida o discontinuación de diversos negocios, entre los que figuran Enstor Gas Storage o el área de Ingeniería, así como planes de mejora de la eficiencia operativa.