Este jueves estaba señalado en rojo para las dos partes implicadas. Los responsables del centro logístico de Amazon mantuvieron una reunión con el comité de trabajadores de San Fernando de Henares (Madrid) para intentar desbloquear la situación para firmar un nuevo convenio colectivo. Y tras intensas horas de negociación, la cosa sigue igual. O peor.
Los acuerdos a los que se debían haber llegado, o al menos acercar posturas, no se han producido, ni mucho menos. Ahora, las negociaciones siguen encalladas en el mismo lugar, pero con menos tiempo de margen de maniobra.
La próxima semana (28 de febrero) es la fecha tope para que se llegue a un acuerdo, y la pasada reunión era una intentona positiva para que se firmase el nuevo convenio, por lo menos eso afirmaban ambas partes. Pero no. Según ha podido saber EL ESPAÑOL no habrá una reunión. En este tira y aflojas, “se esperan que haya nuevos correos electrónicos para que se salve la situación”, indican fuentes a la negociación.
Amazon tiene la sartén por el mango. En caso de que el colectivo de trabajadores y los dirigentes de la filial española no lleguen a un acuerdo, se establecerá el colectivo sectorial que rige en los demás centros logísticos de España.
Cabe recordar que esta planta tiene una singularidad respecto a las otras seis que hay repartidas por la geografía española. Los trabajadores con contrato indefinido están sujetos a un convenio diferente que el resto. La razón es obvia: es la más antigua y mantiene unas reglas diferentes ya que la compañía de Jeff Bezos impuso nuevas condiciones al resto de centros según fueron contratando a personal.
Los salarios de los trabajadores indefinidos y los complementos IT (baja médica) son los dos puntos que más discrepancias están creando en las negociaciones, como ya contó este medio hace varios días. Además, la reducción de contratos temporales en la planta de Amazon es otra de las cuestiones que deberá abordarse antes del 1 de marzo, fecha que caduca el vigente acuerdo.
Ambas partes han sido escuetas en sus explicaciones, tal vez para guardar sus cartes de cara al desenlace. Fuentes de la negociación indican que esperan “que se resuelva de la mejor maneras y que salgan contentas las dos partes”.
Por su parte, Amazon vuelve a insistir en el “compromiso de colaborar justamente con todos nuestros empleados, ofreciendo condiciones de trabajo de calidad y un entorno inclusivo. Todos los trabajadores de Amazon reciben un atractivo sueldo y un completo paquete de beneficios”.
Si nada y nadie lo renueva el 1 de marzo, los trabajadores estarán bajo el paraguas del nuevo convenio. Los sindicatos están dispuestos llegar hasta el final y podrían acudir a los tribunales, e incluso programar huelgas.