Llevaba cuatro años sumida en los números rojos, pero este año ha vuelto a coger aire. Tendam, la compañía que engloba a marcas como Cortefiel, Springfield, Women'secret o Pedro del Hierro, se prepara para dejar atrás una época complicada y dar el salto a Bolsa, previsiblemente el próximo año.
Unos planes ambiciosos que vienen empujados por unos resultados que marcan el cambio de etapa, el que inició Jaume Miquel cuando se puso al frente del grupo en septiembre de 2016. Entonces, insistía en que había que realizar una profunda transformación, para estar en condiciones de seguir compitiendo con su gran rival -Inditex- y desprenderse de la deuda que arrastraba.
En dos años, se ha desprendido de cerca de la mitad. Así, en marzo de 2016, cuando los fondos CVC y PAI adquirieron la totalidad del grupo, la deuda se situaba en cerca de 900 millones de euros; a cierre de ejercicio 2017-2018 se sitúa en 514,5 millones. El grupo celebra lo conseguido hasta ahora. No en vano, Tendam registró un beneficio neto de 98,6 millones de euros en su último ejercicio fiscal, frente a los 24 millones que perdió el año anterior.
Asimismo, la compañía, que logró un beneficio operativo (Ebitda) recurrente de 170 millones -un 48% más que el año anterior-, ha registrado un repunte de sus ingresos del 2,4%, hasta 1.154,7 millones, pese al cierre de superficie comercial "no rentable". En términos comparables, las ventas subieron el 4,8%, ha informado hoy la compañía.
"Es el primer ejercicio completo que refleja los efectos del plan estratégico implementado en Tendam, cumpliendo con nuestros compromisos. Como resultado todos los mercados, canales y marcas han registrado comparables positivos y han mejorado su rentabilidad", se felicitaba Miquel. Un plan que pasa por varios ámbitos, desde sanear las tiendas hasta cambiar la imagen.
Cerrar lo no rentable y cambiar de piel... hacia bolsa
Durante estos últimos años, Tendam ha dedicado parte de sus recursos a sanear la red de tiendas, lo que implica cerrar las no rentables y abrir en lugares donde los resultados puedan ser mayores. A cierre de ejercicio, el grupo cuenta con una red tiendas que suma 1.988 puntos de venta, seis más que el año anterior, distribuidos en cerca de 90 países (1.180 son propias, 692 franquicias y 116 corners).
Asimismo, también ha trabajado en su imagen, lo que desembocó en el cambio de nombre hace apenas dos meses. "Las marcas pesan mucho a la hora de la decisión de compra en moda, pero no olvidemos que una marca corporativa que las respalde afianza la confianza del consumidor y del mercado", explicaban entonces desde la compañía.
Estos cambios se suman además a su apuesta creciente por el canal online, que supone ahora mismo un 6% de la facturación del grupo; una cifra que está lejos todavía de Inditex (10%) y H&M (12,5%). "El negocio digital ha experimentado un fuerte crecimiento en ventas, con un crecimiento del 26%, mejorando también en rentabilidad y superando a la de las tiendas físicas", explicaban desde Tendam.
Entre sus planes ahora, volver a bolsa, previsiblemente en 2019. Una decisión que se ha visto retrasada -estaba prevista para finales de 2018- porque los fondos CVC y PAI han decidido desprenderse de parte del capital a través de una Oferta Pública de Venta (OPV). Cuando estos dos y Palmira desembarcaron en la compañía textil en 2005, la excluyeron de bolsa tras hacerse con el control mayoritario de la sociedad.
No obstante, después de que el pasado verano CVC y PAI compraran a Permira su parte, la salida a bolsa estaba clara, ya que estaba en la hoja de ruta de los fondos. Ahora, Morgan Stanley, Credit Suisse y Nomura ejecturán la salida al parqué cuando consideren que es el momento idóneo, y después de poner en marcha la OPV.