La Asociación Gremial de Auto-Taxi de Madrid (AGATM) ha trasladado al Ayuntamiento de la ciudad un escrito de alegaciones al proyecto inicial de la Ordenanza Municipal de Movilidad Sostenible, que se encuentra en proceso de tramitación. En él, demandan limitaciones más estrictas a la actividad de los Vehículos de Turismo con Conductor (VTC) como Uber y Cabify, que permitan al Taxi mantener su posición privilegiada frente a ellos.
Se amparan en que el Tribunal Supremo haya calificado al Taxi como "servicio de interés general", a diferencia de los vehículos de arrendamiento con conductor, para exigir que la regulación excluya a estos VTC de determinados beneficios que sí se reconocen a los taxistas.
Así, solicitan que no se permita a los coches de Uber, Cabify y otras plataformas similares circular por el carril bus-taxi y entrar a las Áreas de Acceso Restringido del centro de la ciudad (ARR), ya que consideran que no hay forma de controlar que lo hagan solo para cubrir servicios de contratación previa y que no realicen captaciones ilegales de clientes en la zona.
Sin servicio en días de alta contaminación
Al no tener estas plataformas la condición de servicio público de interés general, desde AGATM entienden que debe prohibirse su tránsito en las zonas limitadas durante episodios de alta contaminación atmosférica o grave congestión del tráfico, de manera similar al del resto de coches particulares.
Los taxistas defienden también que los vehículos de arrendamiento con conductor no puedan detenerse ni estacionar con el fin de recoger o esperar a sus clientes en paradas de bus, taxi o el propio carril taxi-bus; en áreas de aparcamiento vecinal; ni en zonas reservadas para establecimientos hoteleros.
Justifican esta medida en que, a su juicio, permitirlo puede generar que se organicen paradas irregulares de VTC que hagan competencia desleal al servicio de recogida de viajeros en lugares de este tipo reconocidas únicamente a los taxis. Y exigen, asimismo, un régimen sancionador que permita a las autoridades la inmovilización o retirada de los vehículos de Uber y Cabify en caso de incumplir esta normativa.
Tránsito por calles peatonales
Por último, la asociación presidida por Miguel Ángel Leal pide que la Ordenanza excluya expresamente a los taxis de las prohibiciones y limitaciones impuestas para zonas peatonales, de forma que puedan circular libremente por ellas, y que las excepciones reconocidas al gremio de taxistas para acceder a las AAR y a áreas limitadas durante los episodios de alta contaminación sean obligatorias en la regulación y no de carácter meramente facultativo.