Uber y Cabify suspenden su actividad en Barcelona por las agresiones a sus conductores

Uber y Cabify suspenden el servicio en Barcelona. Lo hacen tras las agresiones sufridas por parte de algunos sectores del Taxi, que está en huelga en protesta por la decisión de Fomento de recurrir el reglamento de Ada Colau para limitar la presencia de las dos multinacionales en las calles de la ciudad. 

En un comunicado de la patronal Unauto, ambas empresas denuncian episodios de violencia extrema vividos en las calles de Barcelona. "Agresiones en las que no sólo se ha atacado a los vehículos, también a sus conductores y pasajeros", relatan. 

Unauto considera "indignante la impunidad" con la que operan algunos grupos, y aseguran que "trabajarán junto a las autoridades para que los culpables sean detenidos y juzgados". Así que reclaman "el amparo de las instituciones y las fuerzas de seguridad" para que "protejan a los trabajadores, a quienes se les niega su derecho a trabajar y ven peligrar su integridad física". 

Como muestra de lo ocurrido han difundido varios vídeos recogidos por El Periódico elaborados por Carlos Márquez con las agresiones sufridas por los vehículos. En uno de ellos se puede ver cómo varios individuos atacan una de las unidades y comienzan a lanzar piedras y pintar sus puertas con spray. Lo hacen pese a que el conductor les insiste en que es su trabajo y que en el interior hay una niña menor de edad. 

La situación llega hasta el extremo de que los agresores llegan a abrir la puerta en la que viajan los pasajeros, y el padre se ve obligado a salir para proteger a su familia de los ataques. 

En el otro vídeo difundido por la patronal se puede comprobar cómo frente al Hotel Palace de Barcelona un grupo de taxistas lanzan bengalas contra un coche que está recogiendo a pasajeros. 

Las agresiones han llegado después de la multitudinaria manifestación de los taxistas por las calles de Barcelona y que ha transcurrido sin incidentes. En ella protestaban contra la decisión de Fomento y la CNMC de recurrir el reglamento de Colau para limitar a Uber y Cabify y que establece una licencia municipal en las calles de la ciudad.