La popular aplicación MyTaxi ya había salido a criticar, con cautela, la violencia ejercida durante las primeras horas del que ya se va conociendo como 15M del Taxi. Pero, en declaraciones a EL ESPAÑOL, su responsable de comunicación, Sandra Sancho, va mucho más allá.
Sancho no cree que sea un debate tecnológico, ya que el taxi cuenta con herramientas como la suya que le permite competir en igualdad de condiciones. Cree, eso sí, que la regulación actual no permite evolucionar al Taxi, y considera esencial que se le permita ser más competitivo y que haya cambios que promuevan más flexibilidad de horarios y de tarifas para competir con Uber y Cabify, que utilizan las licencias VTC.
"Trabajan con nosotros 9.000 taxistas, un 10% del parque total, y los números avalan nuestro discurso. Muchos taxistas trabajan con nosotros porque creen en nuestra filosofía", subraya la directiva.
Para ella, se ha llevado a los taxistas "al límite" y es preciso "hacer cumplir la ley". Es importante recordar que desde la aplicación siempre se ha hablado de la convivencia en armonía entre distintos medios de transporte y que son mucho más conciliadores y realistas respecto a la situación de las VTC de lo que están siendo estos días los taxistas.
MyTaxi ha mantenido una interlocución constante con las organizaciones representativas del taxi y con la administración durante los últimos días. De hecho, Sancho asegura que se frenaron los ataque porque le consta que "Élite tomó medidas".
La aplicación considera que no se puede criminalizar un sector que ha demostrado ser "altruista" y que ha tenido importantes gestos con la ciudadanía. Sin citarlos, parece obvio que se refiere a los momentos en los que Élite Taxi en Barcelona ayudó a evacuar a transeúntes atrapados en el atentado de agosto del año pasado en la Ciudad Condal.
"Una vez que haya una solución tenemos que reposicionar el sector para que tenga la imagen que se merece", explica la portavoz de la aplicación, para quien "existe mucho desconocimiento y la gente defiende a quien cree que es más débil".
Preguntada por el impacto en su negocio, lo dejó claro: "vemos la situación con preocupación. Es un momento de transición y no es momento de hablar de cifras, sino el de dar apoyo al sector, aunque condenamos cualquier acción violenta".