El fundador y consejero delegado de la firma estadounidense de vehículos eléctricos Tesla, Elon Musk, ha confirmado que está trabajando con Silver Lake y Goldman Sachs como asesores financieros para el desarrollo de una propuesta definitiva de exclusión de Bolsa de la compañía.
Musk, que hizo esta comunicación en Twitter, se mostró "entusiasmado" por trabajar con estas dos entidades de inversión como asesores financieros, mientras que confirmó que también lo hace con Wachtell, Lipton, Rosen & Katz y Munger y Tolles & Olson que ofrecerán asesoramiento legal en esta operación.
El consejero delegado de la compañía hizo este anuncio después de anunciar que el fondo soberano de Arabia Saudí ha manifestado su interés en participar en el proceso de exclusión de Tesla de Bolsa y que está manteniendo reuniones con grandes inversores de la compañía en el marco de esta operación.
Musk comunicó el pasado 2 de agosto al consejo de administración de la empresa su intención de convertir a Tesla en una firma privada, haciendo que dejara de cotizar en Bolsa, a un precio de compra de las acciones de 420 dólares (362 euros).
El directivo indicó que, además de con el fondo soberano saudí, también está manteniendo reuniones con granes inversores de la compañía, con el fin de recabar su apoyo en una hipotética exclusión bursátil del fabricante de automóviles.
La previsión de Musk es que, en caso de que el proceso se lleve a cabo, dos tercios de los actuales accionistas de la firma estadounidense se mantendrán en ella fuera de Bolsa, por lo que únicamente habría que recomprar el 33% restante.
En opinión de Musk, ser una empresa cotizada somete a Tesla al ciclo de trimestral de ganancias que ejerce "una presión enorme" sobre la compañía para tomar decisiones que pueden ser adecuadas para un trimestre determinado, pero no necesariamente a largo plazo.