Los ingresos del semestre se redujeron un 21,3% hasta los 197 millones debido a esta falta de disponibilidad de "stock", que ha impactado negativamente al negocio en los últimos meses, y en especial a los negocios de Alemania y España. Por su parte, el resultado bruto de explotación (ebitda) se redujo un 72 % hasta los 2,04 millones.

La compañía sostiene que, al igual que los dos trimestres anteriores, los resultados se han visto penalizados por esta circunstancia, que se espera resolver paulatinamente gracias a la financiación adicional por 20 millones de euros que ha obtenido de las entidades financieras, según ha señalado en un comunicado.

Por otra parte, la compañía ha acordado una opción de venta del almacén de Tres Cantos (Madrid) por 22 millones de euros que está previsto que se haga efectiva antes del 2 de octubre y que supondría una plusvalía de unos 6,7 millones de euros.

Además, el grupo ha señalado que a mediados de mayo llegó a un acuerdo con la administración concursal de Unipapel para cancelar el contrato de arrendamiento de las tres fábricas (Tres Cantos, Logroño y Aduna) propiedad de Adveo que hasta la fecha venía ocupando Unipapel y el consiguiente reintegro de estas instalaciones.

De esta forma, Adveo volverá a disponer de sus almacenes en estas tres ciudades y seguir con su plan de desinversiones, contemplado en el Plan Estratégico 2017-2020.

La deuda financiera neta se situó en 146,7 millones, 2 menos que en diciembre, aunque 9 millones más que en el primer semestre de 2017.

A comienzos de septiembre, Staples Solutions, filial de Cerberus, realizó una oferta no vinculante a los bancos acreedores de Adveo para comprarles la deuda financiera y capitalizarla.

Adveo subraya que esta operación resolvería de forma definitiva el problema de endeudamiento estructural que arrastra el grupo y contribuiría a construir un grupo líder en Europa. EFECOM

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