Un juez de Madrid ha impedido este lunes 'in extremis' que Sacyr pueda vender la participación del 15,5% que tiene en Itínere a Corsair, actual primer accionista de la empresa, en vez de atender al acuerdo de venta que alcanzó con Globalvía el pasado mes de julio.

En concreto, el Juzgado de Instrucción número 82 de Madrid ha aceptado las medidas cautelares solicitadas por Globalvía contra la oferta de compra que Corsair planteó a Sacyr.

Las cautelares se han aceptado este mismo lunes, justo cuando el consejo de administración de Sacyr deliberaba sobre a quién vender su participación en Itínere y un día antes de que mañana martes venciera el plazo que Corsair, como primer accionista de Itínere, tenía para contraofertar.

Según fuentes del sector, la constructora que preside Manuel Manrique se habría inclinado por la venta a Corsair, con lo que las cautelares habrían obstaculizado la operación.

Dichas cautelares "prohíben a Sacyr que transmita acciones de Itínere a nadie que no sea Globalvía", según informaron a Europa Press en fuentes involucradas en el proceso.

Las cautelares estarán vigentes hasta que el juzgado emita sentencia sobre el fondo del asunto demandado por Globalvía en los plazos judiciales ordinarios habituales.

En este tiempo, y según dichas fuentes, Sacyr tiene la opción de cumplir al acuerdo alcanzado en julio con Globalvía y venderle su 15,5% de Itínere, o quedarse con la participación y esperar a que el juez se pronuncie.

En fuentes de Sacyr confirmaron haber recibido dichas medidas cautelares, pero declinaron hacer más comentarios al respecto.

EN VÍA MUERTA

Así, al derivar Globalvía a la vía judicial la batalla abierta con Corsair por Itínere, queda de nuevo en suspenso, la venta de esta empresa, que sus socios persiguen desde hace años.

Tras la paralización de todo proceso de desinversión durante la crisis, la operación estuvo durante el pasado año pendiente del arbitraje que Sacyr y el resto de minoritarios instaron contra Corsair ante la Cámara de Comercio de Madrid por las trabas que estaba poniendo a la venta de sus participaciones.

En esta ocasión, el contencioso surge tras el acuerdo que Globalvía, grupo de concesiones controlado por tres fondos extranjeros, alcanzó el pasado mes de julio con Sacyr, Abanca y Kutxabank para comprarles sus participaciones en Itínere del 15,5%, el 23,8% y el 16,3%, respectivamente.

Ante este pacto, Corsair decidió ejercer el derecho de igualar la oferta que tiene como primer socio de Itínere. No obstante, dirigió su oferta sólo a Sacyr y su 15,5%.

Corsair, que se alió con el fondo holandés APG en su puja por Itínere, ya tiene un 38% de esta empresa. Así, en caso de hacerse con el porcentaje de Sacyr, sumaría un 59% y superaría así el 55,6% que tomaría Globalvía con su compra a tres bandas.

Este grupo de concesiones que preside Juan Béjar considera que la contraoferta debe ser también a los tres socios, y no sólo a la constructora. Además, asegura que Sacyr y el resto de socios de Itínere se enfrentan al pago de una penalización de unos 100 millones en caso de que no cumplan con el acuerdo de julio.