Antonio Brufau, presidente de Repsol, considera que la inversión en exploración y extracción de crudo a largo plazo es algo "ilógico". Una previsión que viene motivada por la evolución de los precios de la materia, así como de la evolución de la demanda.
El máximo responsable de Repsol ha hecho estas declaraciones en el diario Financial Times, en donde ha alertado de los efectos que puede haber en el medio plazo la falta de inversiones por parte de las petroleras en los tiempos de la crisis. "El impacto de la falta de inversión cuando todas las energéticas dejamos de invertir durante la crisis no se ha dejado sentir todavía", alerta. Y es que, allá por 2014 cuando los vientos venían de cara, buena parte de las compañías optaron por ajustar sus reservas y reducir sus costes para intentar cuadrar las cuentas.
A partir de ese momento las inversiones de petroleras y gasistas se hacían pensando en el corto plazo, como muestra que "la vida de nuestras inversiones sea ahora de seis a siete años", según Brufau.
Apuesta por el gas
Ese recorte inversor puede provocar en el medio-largo plazo, y a medida que vaya aumentando la demanda de crudo, puede venir una crisis de suministro. En concreto, estima -basándose en estudios de la Agencia Internacional de la Energía (AIE) que los problemas pueden estar a principios de la próxima década.
¿Invertir en exploración es poco rentable sólo por el precio del crudo? En absoluto. El presidente de Repsol explica en el Financial Times que en este cambio de foco del sector influye también la situación del mercado y la apuesta cada vez mayor por energías renovables y los coches eléctricos. No hay que olvidar, señala, que las grandes industrias que utilizan combustible para el transporte y que son intensivas en carbono se ven obligadas a reducir las emisiones.
El presidente de Repsol explica en el Financial Times que la petrolera invertirá 15.000 millones de euros hasta 2020, de los que el 53% irá destinado a exploración y producción y el resto a activos de refinación, químicos, gas, energía y bajos niveles de emisiones.
Aunque en los últimos tiempos la energética ha ido virando su estrategia y fijándose en activos de renovables, Brufau destaca que su negocio principal seguirá siendo el petróleo y el gas, aunque se han destinado ya 2.500 millones a energías más limpias.
Evolución del precio
En concreto Repsol ya ha ido equilibrando la producción en favor del gas sobre el petróleo, ya que éste jugará un papel esencial en la generación de energía del futuro junto a las renovables.
Brufau estima que el precio del crudo puede seguir creciendo en los próximos meses, pese a que su precio se encuentra en máximos en este momento. Hay diversos factores que empujan al alza sus precios, entre ellos las exportaciones de petróleo de Irán, que se ve muy presionada por las sanciones de Estados Unidos. Cómo evolucione el precio "dependerá de la capacidad que tengan los productores de la OPEP para suplir esas aportaciones, y de las reservas que tengan, y no creemos que tengan demasiada", apunta el directivo.