Vodafone no se arrepiente de haber renunciado al fútbol. Antonio Coimbra, CEO de la compañía en España, ha defendido este martes la decisión adoptada antes del verano de no contratar la Champions League, pese a la pérdida de clientes, la reducción de sus ingresos y la caída de sus resultados operativos que ha reportado la operadora para su primer semestre fiscal.
En el primer semestre fiscal de la compañía (de abril a septiembre) su Ebitda cayó un 27% tras llegar a los 542 millones de euros. Unos resultados lastrados por la pérdida de clientes -118.000 menos en banda ancha fija y 98.000 en televisión-, lo que se ha saldado con ingresos de 2.421 millones (un 3,2% menos) y de 2.205 millones por ingresos de servicios (un 4,7% de caída).
En una comparecencia en la que el fútbol ha vuelto a ser protagonista, Coimbra ha recordado que su apuesta por renunciar a este deporte -"un segmento no rentable para la compañía"- es a largo plazo y que los beneficios se comenzarán a ver a partir de la temporada 2019 cuando dejen de emitir los ocho partidos de Liga que todavía tienen contratados y rebajen definitivamente la factura del fútbol, unos 330 millones de euros anuales, según ha vuelto a recordar.
Reducción de costes por el fútbol
Hasta el momento Vodafone pagaba 980 euros por clientes al año por el fútbol, pero en mayo del próximo año estos costes comenzarán a mejorar el Ebitda, según indicó. Esto significará reducir costes en el año fiscal 2019 de 150 millones y de 240 millones a partir del curso 2020, como ha indicado la compañía.
En términos absolutos, Coimbra ha indicado que la foto es positiva ya que mantienen 11,58 millones de clientes de móvil, 3,22 millones de clientes de banda ancha fija y 1,26 millones de televisión. De esta manera, ha indicado que la petición de portabilidades ha alcanzado su punto más álgido en septiembre y que la cuarta semana de octubre se ha ralentizado el movimiento de clientes.
¿Se ha acabado completamente la pérdida de clientes por el fútbol? Coimbra ha reconocido que lo peor ya ha pasado y que los abonados más fieles al fútbol habían abandonado casi completamente la compañía. Pese a ello ha recordado que en la próxima temporada podrían seguir perdiendo clientes al comenzar la temporada 2019-2020, cuando ya no cuenten con ningún partido.
En términos generales, Coimbra indicó que Vodafone está "muy bien preparado para afrontar el futuro. Vamos más allá del fútbol", señaló. Y recordó el crecimiento en empresas (que representa el 30% de sus ingresos) del 14,4% por servicios de nuevos negocios en empresas. Un 1,5% de crecimiento generalizado en el sector empresas.
"Grado de consolidación distinto"
Respecto de la reducción de valor de 2.900 millones de euros de la compañía en España, hecho público por su matriz en Reino Unido este martes, por las malas condiciones de mercado en nuestro país, Coimbra ha indicado que la tendencia del sector en toda Europa es negativa y que en España hay un sector competitivo cada vez más complejo.
Coimbra ha recordado que los operadores que invierten más, son los más penalizados. Ha señalado que estamos ante un problema europeo y que el regulador comunitario debería mirar a otros mercados para competir mejor ante China y Estados Unidos. Coimbra volvió a pedir a la UE un "grado de consolidación distinto" y en definitiva, abrir la mano para las fusiones y terminar con la norma no escrita de tener cuatro operadores fuertes por país.
Ha señalado que ningún operador europeo ni español se han mostrado demasiado entusiastas con invertir en 5G, "algo que sí pasa en Estados Unidos" y que estos puede deberse a las pocos incentivos regulatorios para invertir. Pese a ello, ha indicado que la voluntad de la operadora es seguir invirtiendo.
"Racionalizar la carga impositiva"
Respecto a la fiscalidad y en relación a la tasa Google, ha indicado que las telecos ya pagan muchas tasas e impuestos, que financian el cine y la televisión pública - Vodafone paga más de 200 millones de euros al año en España sin considerar impuesto de sociedades-, por lo que ha pedido una reforma fiscal al sector, pero que facilite las cosas a las compañías de telecomunicaciones y que esté en la línea de facilitar las inversiones en 5G del futuro.
De esta manera, la compañía ha pedido racionalizar la carga impositiva, quitar la incertidumbre y facilitar las futuras inversiones de un sector clave para el desarrollo dentro de España. Han indicado además que España sigue siendo uno de los países que más tasas pide a las telecos con RTVE, espectro, tasas ecológicas y "lo más variado que se pueda imaginar".
Noticias relacionadas
- El efecto MásMóvil también obliga a Vodafone a buscar clientes de ‘gama media’
- Vodafone presenta bit: su 'anti O2' con servicios y precios 'sencillos'
- Telefónica y O2, víctimas de una CNMC que no se esfuerza en analizar el mercado
- Vodafone España reduce un 4,8% sus ingresos trimestrales tras perder 66.000 clientes de TV
- Vodafone provisiona 2.900 millones por el deterioro del negocio en España