Ricardo Currás no se ha ido con las manos vacías de Dia. Su despido como consejero delegado de la cadena de supermercados le ha reportado 2,1 millones de euros en concepto de salarios e indemnizaciones por su salida.
En concreto, el consejero delegado percibió 497 mil euros en sueldo desde el 1 de enero hasta el 24 de agosto; 1,6 millones de euros de indemnización y otros 100.000 euros fruto de lo que debía cobrar por la cláusula de no competencia que tenía en su contrato y que, en total, asciende a algo más de 600.000 euros. Sin embargo, esa cantidad no la va a cobrar porque Dia ha decidido frenar los pagos por ahora.
Según informa el Grupo en el informe anual de remuneración de los consejeros, la comisión de nombramientos y retribuciones estudia si debe aplicarse la claúsula de clawback. Es decir, si debe o no solicitar al ex consejero delegado que devuelva algunas cantidades relativas a lo que ha cobrado de la empresa. ¿El motivo? Que podrían haberse detectado información cuya falsedad aflore riesgos asumidos no previstos por la sociedad y que tenga un efecto negativo sobre la misma.
El salario del nuevo CEO
A falta de conocer el informe definitivo de la auditoría, parece que habrían detectado irregularidades en las cuentas de ejercicios anteriores y que podrían haber llevado al deterioro de la compañía que ha presentado unas pérdidas de 352 millones de euros en 2018.
La decisión se adoptará a lo largo del presente año, y también se tomará sobre el exconsejero delegado Antonio Coto quien, sin embargo, no ha percibido cantidad ninguna en concepto de indemnización.
El dinero percibido por Currás ha disparado los salarios del consejo de administración de Dia hasta los 3,4 millones de euros.
Dentro del salario que percibirá el nuevo consejero delegado, Ricardo de la Cierva, aparece una remuneración fija en metálico de 606.000 euros, a la que hay que sumar un variable que puede duplicar si logra determinados objetivos. A ello hay que sumarle aportaciones a planes de pensiones, seguros de vida y médico, así como el coche de empresa.
Los objetivos de los variables van ligados a las ventas, los resultados y la satisfacción con los clientes.