Si me diesen un euro por cada vez que he escuchado la palabra 5G desde que he llegado al Mobile World Congress, podría comprarme un Mate X o un Galaxy Fold. La gran feria de la tecnología móvil está plagada de dispositivos, casos de uso y propuestas de redes relacionadas con esta evolución.
Sin embargo, los datos son tozudos, y demuestran que hasta 2020 veremos sólo cosas testimoniales. El 5G es una realidad, pero una realidad pequeñita.
Previsiones para 2019
La división de estudios de la patronal del móvil, GSMA Intelligence, calcula que a final de 2019 sólo habrá activas diez millones de conexiones en todo el mundo. Pueden parecer muchas, pero no lo son.
Los chinos lideran
En China, cuando hacen un piloto pequeño lo llaman Fernando Alonso y afecta a muchos miles de personas. Los once nodos de Vodafone en el Mobile o el puñado que ha desplegado Telefónica para la feria son testimoniales en comparación con lo que se hace en China y en esa región. Asia Pacífico tendrá dos tercios de todas las conexiones 5G a final de año.
Concretamente, un 65%, frente al 28% de Norteamérica, el 5% de Europa y el 2% a repartir entre el resto.
Unos pocos mercados
La 5G sólo estará activa en 21 mercados a final de año. Esa es la mala noticia. La buena es que España es uno de los pocos países europeos que están en la lista.
La curva es astronómica.
El objetivo es que las conexiones a 5G alcancen los 1.400 millones en 2025. Cuando llegue ese momento, eso sí, Asia Pacífico seguirá teniendo la mitad de todas las conexiones. En aquel momento, el 15% de las conexiones móviles del mundo serán 5G.