La presidenta del Banco Santander, Ana Botín, percibió en 2018 una remuneración total de 11 millones de euros, lo que supone un 4% más que los 10,58 millones con los que fue retribuida en 2017, según consta en el informe anual de la entidad.
De su lado, el consejero delegado, José Antonio Álvarez, obtuvo una retribución de 9 millones de euros, un 1% más que los 8,89 millones ganados el ejercicio precedente, mientras que Rodrigo Echenique, vicepresidente del consejo, percibió una remuneración de 5,09 millones, un 19% superior a los 4,28 millones obtenidos en 2017.
Estos incrementos en la retribución de Botín, Álvarez y Echenique se producen en un año en el que el beneficio del banco aumentó un 18% y el dividendo por acción un 4,5%.
Tal y como anunció hace un año, el Santander aplicó en 2018 un cambio en la remuneración por la cual se han reducido las dotaciones a los planes de pensiones de los consejeros ejecutivos, a la vez que aumenta la remuneración fija y otros conceptos, de manera que esta variación en los componentes de la remuneración es neutra en el total.
Remuneraciones del consejo
En 2019, la presidenta y el consejero delegado mantendrán el mismo salario anual base, de 3,17 y 2,54 millones, respectivamente. En 2020 y 2021 podrán aumentar esta retribución fija en un máximo del 5% con respecto al año anterior.
El conjunto del consejo del Santander, compuesto por 17 miembros, percibió 28,91 millones de euros en 2018, con un descenso del 9,4% respecto a los 31,63 millones de un año antes.
Por su parte, el conjunto de la alta dirección percibió 60,26 millones de euros en 2018, un 8,1% menos que los 65,58 millones de un año antes. Este descenso se produce con un directivo menos (19 en 2017 frente a 18 en 2018).