Vector Ronda, uno de los principales propietarios de licencias VTC y proveedor de coches de Cabify, ha puesto en marcha un despido colectivo en Cataluña. En concreto, serán 800 personas las que perderán su puesto de trabajo una vez que concluyan las negociaciones que ha puesto en marcha con los trabajadores.
Una "durísima" decisión que se adopta tras el 'decreto Calvet' que obliga a que las VTC que trabajan con Uber y Cabify tengan que ser precontratadas con quince minutos de antelación. Un tiempo que se extiende hasta los 60 en el caso del Área Metropolitana de Barcelona.
"Sólo el 3% de los servicios de VTC en Cataluña son bajo reserva y en el 98,5% de los viajes los usuarios tienen un tiempo de espera inferior a los 15 minutos", indican. Esto sginifica, insisten, en que "el decreto condena a los ciudadanos a quedarse sin VTC y al desempleo a 4.000 trabajadores en todo el sector".
Defender al sector
Según explica Vector Ronda el despido colectivo en su empresa afectará a 800 empleados dado que 200 ya han abandonado la compañía. Según explica algunos han terminado el contrato y otros han encontrado otro puesto de trabajo.
En una nota remitida a los medios la compañía insiste en que "defenderá al sector y a sus trabajadores utilizando las vías legales que estén a su alcance ante una norma injusta e inconstitucional".
Recuerda también que organismos como el Consejo de Garantías Estatutarias y la Autoridad Catalana de Competencia han declarado que el texto aprobado por la Generalitat y convalidado por el Parlament no se ajusta a derecho y no son proporcionales.