Nadie duda que Netflix es la plataforma de series y cine con mayor pedigrí del mundo audiovisual. Está avalada por 139,2 millones de suscriptores en todo el mundo y una inversión en nuevas producciones de 15.000 millones de dólares que asusta a todas las grandes majors. Éxitos mundiales como Stranger Things, La Casa de Papel, Narcos, Black Mirror y la recientemente oscarizada Roma, son pruebas de que apuestan por la calidad dinamizando el mercado.
Una fuerza lo suficientemente importante para navegar en solitario. No obstante, en España la plataforma ha decidido crecer de la mano de las operadoras de telecomunicaciones locales. Vodafone, Orange, Euskaltel y Movistar han ido poco a poco incorporando sus contenidos hasta ofrecerlos como parte de sus paquetes convergentes con televisión, fibra óptica y móviles.
Una estrategia que ha garantizado su crecimiento hasta cerca de los dos millones de hogares conectados en España, según la CNMC, y que tendrá su prueba de fuego en el alza de tarifas que prepara Netflix para España y toda Europa en el transcurso de este año. Una eventual pérdida de clientes que podría ser frenada precisamente por las alianzas con estas operadoras españolas. Esta es la historia de cómo las telecos salvarán a Netflix en España.
Netflix aterrizó en España en octubre de 2015, bajo las suspicacias del sector audiovisual tradicional y con muchas reticencias por parte de las televisiones. ¿Una plataforma con series y películas por ocho euros al mes?. Netflix lo hizo posible y poco a poco comenzó a aumentar el número de suscriptores como la espuma, gracias a su estrategia de un mes de prueba gratis, a la afiliación sin permanencia, y a la complacencia con el hecho de que sus usuarios compartiesen las claves del producto. Pero también gracias a sus acuerdos.
Crecimiento de Netflix en tres años
Un camino de tres años y medio -el de los acuerdos con las telecos- que comenzó Vodafone a las pocas semanas de la llegada de Netflix a España. Fue un desembarco tímido, pero dejando claro que la alianza era a largo plazo. En 2015 se ofreció Netflix durante 6 meses de regalo para nuevos clientes y para clientes existentes con paquetes Vodafone One M ó L que tuviesen contratada la televisión Luego se pasó a cobrar el paquete de la plataforma por separado.
Un año después -en noviembre de 2016- Orange sumó Netflix a su oferta, también con un periodo promocional de tres meses gratis, pero luego con un precio del paquete de diez euros, al mismo nivel de los cobra Netflix por separado en su propia plataforma. En sus comienzos, tanto Vodafone como Orange solo permitían ver Netflix dentro de sus decodificadores y solo mediante su propia aplicación.
¿Resultado? Las suscripciones de Netflix se dispararon. En dos años, superó el millón de altas y según los últimos datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ya estaría en los dos millones de clientes. En el mercado hay discrepancias sobre estas cifras, aunque sí que hay coincidencia en que tanto Orange como Vodafone han sido uno de los factores que han impulsado este crecimiento.
Fuentes del sector indican a este periódico que la implantación real de Netflix, que muchas fuentes cifran realmente en 1,3 millones de usuarios, no se entendería sin las telecos españolas, que han ido paulatinamente fusionando sus ofertas con la plataforma internacional. Y ha sido un crecimiento recíproco. En el caso de Vodafone, antes de Netflix tenía 900.000 suscriptores y hoy mantiene 1,28 millones de clientes; mientras que Orange ha pasado de 458.000 a 716.000 suscriptores.
Telefónica integra Netflix
Es verdad que en este periodo las dos plataformas han reforzado sus televisiones con múltiples alianzas y derechos deportivos y que además han vivido una guerra del fútbol particularmente negativa para la operadora británica, pero también es cierto que en este tiempo Netflix ha sido uno de los protagonistas de su oferta de televisión
En esta línea, el último en dar el paso fue Telefónica. La operadora anunció su alianza con Netflix en mayo del año pasado, aunque no fue hasta diciembre que incorporó definitivamente sus contenidos. Esta alianza se produjo tras un cambio de estrategia que abrió la puerta a la colaboración de la operadora con partners de todo el mundo y de todos los sectores para enriquecer la oferta de servicios y contenidos de sus clientes.
La novedad es que Telefónica dio el paso con el máximo nivel de integración posible. Movistar+ se estrenó con Netflix como un contenido totalmente empotrado en su plataforma, y la incorporó en su factura y dentro de sus propios paquetes convergentes, junto con el resto de su televisión, fibra óptica, línea fija y líneas móviles.
Fue este precisamente el último gran paso en el matrimonio de las telecos y Netflix. Desde diciembre, Movistar lo ofrece como un contenido más dentro de su oferta convergente y desde hace unas semanas Orange ha seguido una estrategia similar, también integrándolo en sus paquetes Love. Los precios varían, pero la clave está en que las operadoras han entendido que pueden rentabilizar Netflix y unirlo con el resto de sus servicios, fidelizando a los clientes de las dos plataformas.
Subida inminente de precios
Una decisión que podría ser la la clave de la salvación de Netflix en España. La plataforma ha comenzado a hacer pruebas para subir su precio en nuestro país. Netflix aterrizó en España con tres tarifas: Básica a 7,99 euros, Estándar a 9,99 euros y Premium a 11,99 euros. Casi cuatro años después los test que está realizando la operadora con diferentes usuarios elevan los precios entre dos y cuatro euros.
El Básico con calidad SD y una sola pantalla se mantiene en 7,99 euros, pero el plan Estándar, con dos pantallas, pasaría de 10,99 euros a 12,99 euros. Del mismo modo, el Premium -que engloba el servicio Ultra HD- pasaría a costar 17,99 euros, frente a los 13,99 euros actuales. La operadora no confirma estas subidas, pero en el sector se asume que antes de fin de año comenzarán a aplicarse estos nuevos precios como ya ha pasado en Estados Unidos y Latinoamérica.
¿Qué supondrá esto para su evolución de abonados? Desde Netflix se empeñan en difundir encuestas que indican que el precio no es lo más importante para sus clientes y que la mayoría estarían dispuestos a pagar un poco más por los mismos servicios. Propaganda aparte, lo cierto es que la alianza con las telecos sería de gran ayuda para evitar una eventual fuga de clientes.
Por un lado, el hecho de que muchos usuarios contraten Netflix a través de Vodafone, Movistar y Orange sería un freno para que se den de baja de todos los servicios convergentes ofertados, incluido Netflix. Por experiencia, sabemos que es más fácil darse de baja de la plataforma de internet que de servicios de una teleco, lo que puede jugar a favor de la plataforma internacional.
Crecimiento con Fusión y Love
Del mismo modo y pese a que las operadoras se verían obligadas a subir el precio de sus paquetes con Netflix, es probable que como hasta ahora, mantengan un gap a su favor, uno o dos euros más barato que si se contrataran todos estos productos por separados. Se produciría un efecto de “contención” que ayudaría a Netflix en una eventual fuga de usuarios que se vean ahuyentados por las alzas de precios.
En cualquier caso, e incluso asumiendo un alza de precio de Netflix, los expertos del sector consultados por este diario indican que el crecimiento de la plataforma está asegurado, precisamente de la mano de las operadoras. Las cifras que se conocen hasta ahora sobre la plataforma indican que su número de usuarios es de 1,3 millones según el mercado y de dos millones de hogares según la CNMC, pero no incluyen el efecto de los paquetes convergentes en estas cifras.
A mediados de febrero, Telefónica comunicó que el 35% de los nuevos clientes que contrataron paquetes convergentes lo hicieron incorporando Netflix a sus productos. Movistar tiene en estos momentos más de cuatro millones de clientes de televisión, la mayoría de ellos Fusión, por lo que las perspectivas de crecimiento, solo de la mano de Telefónica, son muy importantes.
A lo que además hay que sumar los paquetes Love que consiga Orange y que todavía no se han contabilizado. Ello, sin contar con el crecimiento que pueda aportar Vodafone, que incluso podría sumarse en las próximas semanas a esta fiebre de meter Netflix en los paquetes convergentes de las operadoras.